Durante la audiencia del miércoles, el cantante de Los Nocheros sostuvo que produce aceite de cannabis con fines medicinales.
Salta - Mario Teruel, el líder del conjunto folclórico Los Nocheros, se presentó a declarar ayer en la Justicia Federal de Salta para responder como imputado en la causa que se le sigue por el hallazgo de plantas de marihuana en su domicilio. Lo novedoso del caso fue que el músico no solo reconoció que cultivaba esta hierba, sino que producía aceite de cannabis también para uso personal por cuestiones terapéuticas. Al mismo tiempo, dejó entrever que está más preocupado por la causa de su hijo Lautaro, acusado de abuso sexual, que por su particular situación.
Teruel llegó a las 10.30 a los tribunales ubicado en la esquina de las calles Deán Funes y España y permaneció por espacio de 3 horas en el despacho del juez Miguel Antonio Medina. De la audiencia participó el fiscal Ricardo Toranzos y el defensor del nochero, Matías Adet. La fría mañana concentró a una gran cantidad de medios en el lugar ante la enorme expectativa que generó la presencia de Teruel, imputado en una causa relacionada con la ley de estupefacientes.
El músico no solo asumió que cultivaba marihuana en su domicilio, sino que dijo que fabricaba aceite de cannabis, en pequeña cantidad, para uso terapéutico. Explicó que en ninguno de los casos lo hacía con fines comerciales, sino que se trataba de una actividad de corte doméstico. En ese sentido, recordó que es de público conocimiento que desde hace varios años consume marihuana, tal como lo confesó ante los medios de prensa en 2016.
También le aclaró al juez Medina y al fiscal Toranzos que no eran 27 las plantas que el personal de Drogas Peligrosas encontró su vivienda en los primeros días de junio pasado. Aseguró que no eran más de siete y que la confusión surgió porque las especies fueron cortadas en tallos y ramas.
Trascendió que la audiencia se extendió más de lo previsto porque Teruel quiso explicar en detalle lo del cultivo de las plantas de marihuana y lo del secuestro de algunos elementos que hicieron sospechar a los investigadores que, además, elaboraba aceite de cannabis. En ese sentido, el nochero confesó que había montado un pequeño laboratorio para fabricar el derivado de la marihuana para uso medicinal. Teruel habría argumentado que por sus permanentes viajes en avión y vehículos tiene problemas de columna y que usa el aceite para mitigar los dolores.
Para justificar que solo él producía el aceite habría explicado con lujo de detalle todo el proceso para obtener el producto. Al respecto, el imputado habría manifestado que con las pocas plantas que cultiva no es mucha la cantidad de medicina que obtiene, solo la suficiente para curar sus achaques en la vértebra espinal. Con estas declaraciones, Teruel descartó de plano la posibilidad de que haya montado un oscuro negocio. Además, habría señalado que todo lo hacía de manera personal, incluso que ni su familia tenía acceso al minilaboratorio que montó.
El caso se descubrió cuando el fiscal Federico Obeid allanó la vivienda de Teruel, en pasaje Basavilbaso al 200 del barrio El Carmen, en el marco de las investigaciones relacionadas con el caso de su hijo Lautaro, acusado de abuso sexual en perjuicio de dos personas, entre ellas una menor. Luego de observar el cultivo de las plantas en una habitación, el funcionario convocó a personal de Drogas.
El fiscal y la defensa
Según el fiscal Toranzos, Mario Teruel se mostró tranquilo durante la audiencia y respondió con una sensación de seguridad todas las preguntas que le hicieron. "Contó que fuma marihuana y que por los problemas que tiene en la columna elabora aceite de cannabis en pequeña cantidad", expresó Toranzos al diario local El Tribuno.
Dijo que el músico pidió que lo dejaran explicar todo lo relacionado a las plantas de cannabis y a la producción de su derivado. "Aseguró que él era el único responsable del cultivo y la elaboración del aceite, que lo hacía de manera personal, sin la intervención de otras personas", señaló el fiscal federal.
Por su parte, el defensor Adet precisó que "detrás de esto no hay nada oscuro". Y remarcó: "Lo importante es que Teruel esclareció todas las dudas, incluso lo de la cantidad de plantas incautadas. No eran veintisiete, eran siete".