El Granate venció a Independiente Rivadavia de Mendoza con un gol sobre el final de Marcelino Moreno y avanza en la Copa Argentina.
Lanús tuvo la iniciativa durante todo el partido ante Independiente Rivadavia pero recién pudo batir al elenco mendocino en el final. El 1-0 obtenido en la última jugada del partido le dio el pase a los octavos de final de la Copa Argentina.
En tiempo adicionado del juego disputado en la cancha de Arsenal, Marcelino Moreno puso la punta del botín ante un tiro de esquina de Lucas Vera y le dio la victoria al equipo de Luis Zubeldía, que en la siguiente instancia chocará con San Martín de Tucumán o Argentinos Juniors.
El conjunto del sur del Gran Buenos Aires no encontró la manera de perforar a un rival que se mostró ordenado en defensa y prácticamente no le dejó huecos para acercarse con peligro hasta Cristian Aracena en la primera etapa.
En el complemento ubicó algunas grietas, pero no fue efectivo en la definición y se encontró con una buena noche del arquero del equipo mendocino, que se prepara para jugar la flamante Primera Nacional (ex Primera B Nacional).
Agustín Rossi, su colega de Lanús que debutó con esa camiseta, prácticamente fue un espectador de lujo durante todo el encuentro
La única aproximación de riesgo del capítulo inicial fue un cabezazo de Lautaro Acosta que el arquero de la Lepra contuvo sin mayores problemas.
En el complemento el dominio de Lanús se acentuó. Estuvo cerca en los primeros minutos con dos situaciones de gol, pero no tanto como a los 23, cuando Lautaro Acosta desbordó y metió un centro atrás que Guillermo Acosta no alcanzó a direccionar, y como a los 27, cuando Lucas Vera probó de media distancia.
Aracena volvió a intervernir para erigirse como figura del partido a los 31, cuando rechazó por encima del travesaño un remate de Lautaro Valanti, tras una buena acción personal del zaguero Granate.
Pero la emoción quedó reservada para el final. Superada la barrera de los 48 minutos, el árbitro Diego Abal le otorgó una vida más a Lanús y allí apareció Moreno con la punta de su botín para darle la clasificación a un Lanús que había merecido un poco más durante todo el encuentro.