El seleccionado de Gareca venció a la Celeste por 5-4 en la tanda de penales tras igualar durante los 90 minutos sin goles.
El Perú del argentino Ricardo Gareca se clasificó hoy a las semifinales de la Copa América de Brasil, tras eliminar por penales a Uruguay 5-4, luego del empate sin goles en el tiempo regular del partido que se desarrolló en el Arena Fonte Nova de Salvador de Bahía y que tuvo el protagonismo del VAR.
De esta manera, Perú, que había avanzado a semifinales a último momento gracias a resultados ajenos, chocará el miércoles ante Chile, en el clásico del Pacífico, por un lugar en la gran final del domingo 7 de julio.
Uruguay mereció algo más durante los 90 minutos, pero falló en la definición y el VAR le anuló tres conquistas.
El primer tiempo fue parejo, con un buen inicio de Perú, con Guerrera exigiendo a los defensores y un Uruguay al que le costó, pero que con el correr de los minutos se paró mejor en la cancha y empezó a nivelar el juego.
A los orientales le invalidaron bien un gol por una posición fuera de juego de Nahitán Nández, en una jugada que terminaba con el tanto de Giorgian De Arrascaeta, después de una prolija jugada colectiva.
La etapa inicial se perdió con insinuaciones y un cero que dejaba en deuda a ambos equipos.
En el complemento, Uruguay apretó desde el comienzo y llegó profundo a los 12, con una pelota que envió De Arrascaeta y que la tomó Godín y la mandó a las nubes. Uno más tarde, Cavani definió con maestría al gol ante la salida de Gallese, pero el árbitro brasileño Sampaio lo invalidó por posición ilícita.
En 28, nuevamente Uruguay se iba a quedar con las ganas de gritar porque el tanto que convertió Suárez fue anulado por un finito off-side.
El último tramo del encuentro fue favorable a Uruguay, pero los jugadores Celestes sintieron el desgaste de haber jugado en una cancha pesada, por la lluvia, y, pese a dominar, bajaron el nivel.
Perú se defendió y aguantó el empate para ir a definir por penales. Allí, Gallese le tapó el primer tiro a Suárez y luego hubo 100 por ciento de efectividad de parte de los dos lados, para que los incaicos festejen la clasificación a las semifinales.