El Apache terminó ayer con una dolencia y por la mañana tuvo que trabajar apartado del resto del plantel.
Carlos Tevez sufrió ayer un golpe en su mano derecha que lo obligaron a hacerse estudios y este jueves por la mañana a entrenarse diferenciado en Boca.
Sin embargo, la dolencia del Apache no pasó a mayores, y en el trabajo vespertino sí participó a la par del resto de sus compañeros, aunque con una enorme venda en la zona afectada.
De esta manera, el atacante fue parte de las tareas comandadas por el entrenador Gustavo Alfaro en Cardales y el asunto de su mano solo quedó como un pequeño incidente sin consecuencias.