"Fue catastrófico", dijo el ministro de Industria y Energía, Guillermo Moncecchi, sobre el apagón que afectó ayer a casi todo el Uruguay desde 7.06 y se prolongó más de 11 horas.
La conferencia de prensa de Moncecchi y del ente enegético UTE, fue a las 18.30 cuando todavía quedaban barrios sin servicio de luz. El presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla, explicó que la salida del problema se trabajaba "en equipo" con la Argentina. Y advirtió que hasta que el proceso no concluyera en ambos países podía "haber nuevos inconvenientes".
Debido a la falta de energía, las usinas de potabilización de agua vieron afectadas su producción, según informó el ente Obras Sanitarias del Estado (OSE). Para Casaravilla, el problema se debió a fallas en el sistema de trasmisión entre Yacyretá y Salto Grande.
"Un sistema eléctrico no tiene capacidad de almacenar instantáneamente energía, y toda la energía que se genera en tiempo real es consumida por la demanda; hacer que eso funcione armónicamente es el arte de un despacho eléctrico y si es interconectado garantiza mejor ante cualquier contingencia", declaró Casaravilla.
Al final del partido de Uruguay por la Copa América que terminó con victoria de 4 a 0 a Ecuador, todavía quedaban varios barrios sin luz. Los uruguayos habían amanecido con la sorpresa de un masivo apagón.
La central telefónica de UTE quedó desbordada por la cantidad de llamadas de usuarios de todo el país. La falta de suministro de energía abarcabó zonas de los 18 departamentos del interior.
Al no poder comunicarse con la UTE, los usuarios llamaban a las radios y se sentía la preocupación por la ocincidencia con el debut de la selección celeste en la Copa América. También se hablaba sobre el riesgo de que un apagón así se diera el próximo 30, cuando se realicen las elecciones internas, con 2,5 millones de habilitados para votar candidato presidencial único de cada partido.
A las 8, se informó que el problema estaba en la interconexión con la Argentina y eso desató bromas e ironías sobre la dependencia con Buenos Aires, la dificultad para organizar un Mundial de fútbol o la necesidad de desatar vínculos con el Mercosur.