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Espectaculos

Pampita se quebró al aire mientras hablaba de una película que le recordó a su hija Blanca

La conductora no pudo contener su emoción al comentar un film en el que se tratan las tragedias familiares.

16/06/2019

Si a la noche, en el Bailando, Pampita se convierte en una jurado fría y distante, a la tarde, al frente de Pampita Online, parece sentirse cómoda siendo ella misma. Hace poco no pudo contenerse al hablar con Maru Botana sobre las dolorosas pérdidas que sufrieron. Y más cerca en el tiempo, tiró una indirecta que todo el mundo intuyó se dirigía a la China Suárez, la actual de su ex.

Allí, Pampita es Pampita. Otra clara muestra dio este jueves, mientras hablaba de cine junto a Julieta Novarro, la actriz que tiene a su cargo la columna dedicada al séptimo arte. Fue Pampita quien le pidió que viera y comentara el film La vida misma, con Oscar Isaac, Olivia Wilde y Antonio Banderas. Lo que no imaginó la conductora es que una vez que se pusieran a hablar de la película al aire, terminaría emocionándose hasta las lágrimas.

“Habla de cómo nosotros somos nuestros padres, y nuestros hijos son nuestra prolongación, y lo que hagan ellos en la vida es la prolongación de lo que hagamos nosotros”, empezó diciendo Novarro.

En ese momento, las dos empezaron a quebrarse, y se les hizo cada vez más difícil seguir el diálogo. “Todo lo que nos pasa como padres marca a nuestros hijos para el resto de su vida, y qué clase de persona van a ser. Lo bueno y lo malo que nos toca atravesar realmente los marca. Y el ejemplo que les damos cada día”, reflexionó Pampita.

“Los hijos nos superan y uno nunca se imagina que cuando le toca algo muy terrible como una tragedia, cómo se pueden reponer ellos y qué les depara el destino. No sabés con quién te podés encontrar después de una tragedia”, analizó Julieta.

En ese momento, Pampita volvió a tomar la palabra y cerró el tema recordando una frase muy significativa del film. “Si la vida te pone de rodillas, te levantás y seguís”, citó la conductora, con un nudo en la garganta. Y no pudo hablar más. Ya no era necesario decir otra palabra.