La ministra se refirió al decomiso de autos de lujo y yates realizado este viernes. "Queremos que todo ese dinero vuelva a la gente".
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, pidió hoy que el valor de los 38 autos de alta gama y embarcaciones decomisadas en la causa que investiga maniobras delictivas con importaciones ficticias, sea "dinero que vuelva a la gente" por medio de la aplicación de la "extinción de dominio".
"Queremos que se aplique la extinción de dominio a esta banda porque eso implicó una pérdida millonaria para el Estado argentino", aseveró la funcionaria al brindar este mediodía una conferencia de prensa en el Edificio Centinela.
Allí dio detalles del megaoperativo realizado anoche en el marco de la causa por las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI) irregulares, que consistió en diez allanamientos simultáneos en la Ciudad y el Gran Buenos Aires.
"Estamos trabajando con (el juez Gustavo) Meirovich para que todo este dinero le vuelva a la gente", aseveró Patricia Bullrich.
Y, explicó que "esto es producto de una facilidad lamentable que el Estado argentino daba a partir de las DJAI. Este sistema, que funcionó del 2012 al 2016, facilitó un desfalco al Estado que al día de hoy ya presenta un embargo por cinco mil millones de pesos".
El modo de actuar de esta banda consistía en canalizar las operaciones de importación a través de empresas fantasma, es decir que carecían de una actividad comercial real, para fraguar el sistema de control estatal sobre las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI) con las que simulaban importaciones para así realizar giros millonarios de divisas al exterior, bajo la cotización oficial, cuando regía el cepo cambiario, entre 2012 y 2015.
En tanto, ante la demora en una definición parlamentaria en torno a un proyecto de ley de extinción de dominio impulsado por el Poder Ejecutivo Nacional a partir de una iniciativa elaborada por la Oficina Anticorrupción, el presidente Mauricio Macri dictó en enero un Decreto de Necesidad y Urgencia que puso en marcha el mecanismo para bienes provenientes del delito.