En 2013 estuvo el pico más alto con 1907 casos, mientras que a partir de entonces empezó a decrecer, hasta ubicarse en 1157 casos en todo 2018.
La cantidad de casos expuestos en la Oficina de Protección a las Víctimas de Violencia Familiar y de la Mujer (OVFyM) va decreciendo paulatinamente desde su creación, hace casi una década, según los datos estadísticos recopilados por ese organismo del Poder Judicial.
Desde que se puso en funcionamiento, en agosto de 2010, hasta fin de ese mismo año se registraron 527 casos. Esa cifra escaló a 1907 en 2013, mientras que a partir de entonces empezó a decrecer, hasta ubicarse en 1157 casos en todo 2018. Los números corresponden a las Jurisdicciones Capital y a los anexos que funcionan en las ciudades de Las Termas, Añatuya y Frías.
Esta tendencia estadística se vincula, según explicó al Área de Prensa la Lic. Claudia Osorio Meneghini, directora del Área de la Mujer de la OVFyM, con “el compromiso y abordaje que se hace de la problemática y también el trabajo articulado en red con otros organismos”.
En ese sentido, la funcionaria resaltó que “se llevan a cabo actividades de asesoramiento y contención, fortaleciendo los vínculos con la comunidad, como por ejemplo, a través de las Unidades Móviles que atienden en el interior provincial. Además, se trabaja paralelamente en forma abierta con la sociedad, haciendo talleres de concientización y prevención de este flagelo”.
También es fundamental que el Poder Judicial agiliza sus intervenciones, adquiriendo un papel importante en esta temática junto al Juzgado de Género, las Oficinas de Medidas Alternativas y Sustitutivas (OMAS) y el Equipo Técnico de Asistencia a la Violencia (ETAV).
Los resultados positivos se fueron reflejando, asimismo, en el trabajo interinstitucional entre las Unidades Fiscales especializadas en la materia; las Defensorías Civiles y Penales dentro del Poder Judicial y otras instituciones externas, como la Policía de la Provincia y la Dirección de Género, entre otras.
En otro orden, la entrevistada apuntó que “se trabaja sostenidamente en la prevención y acompañamiento que tiene la damnificada. Se busca apuntalar a esa mujer para que pueda darse cuenta que tiene los recursos internos necesarios para salir adelante, fortaleciendo su autoestima y sus redes familiares y sociales de contención”.
Primer trimestre de 2019
En cuanto al primer trimestre de este año, en total se registraron 269 casos, de los cuales 185 se convirtieron en derivaciones a otras dependencias judiciales, en su mayoría al Juzgado de Género y a la Defensoría Civil y de Familia.
Por otra parte, en el primer trimestre de 2019 se contabilizaron 267 casos, de los cuales el 90% son de agresiones de hombres a mujeres. En tanto, la mayor parte de las víctimas se encuentran en la franja etaria que va entre los 22 y 49 años.
En otro orden, buena parte de las afectadas por este flagelo manifestaron que experimentaron violencia simbólica y psicológica, por encima de la física.
Para dar respuesta efectiva a las víctimas, es que los tres Poderes del Estado santiagueño articularon acciones y crearon organismos para abordar esta problemática, que en el caso de la Justicia local, se refleja en el funcionamiento de la OVFyM; el Juzgado de Género y el ETAV.