Los hinchas del equipo de Liniers amenazaron al juez, que se escondió.
El fútbol argentino es así. No permite un mal arbitraje que el exceso y la demencia aparece en todo se esplendor. En este caso es Fernando Espinoza, el árbitro de Boca vs. Vélez, quien fue amenazado por gente del Fortín y su familia atravesó una de las peores semanas de su vida.
"Este fin de semana tuve que esconder a mi familia porque se filtró mi teléfono y recibí amenazas de todo tipo por gente de Vélez. Ya están hechas las denuncias y recién prendí el teléfono. ¿Hasta dónde llegan las redes sociales? Mi hijo está encerrado dos días y no sabe por qué. El de 3 años (Lautaro) no entiende, pero al del 6 años (Tiago) le explique que nos íbamos a quedar descansando en casa", confesó Espinoza en diálogo con el programa Cómo Te Va (AM 630).
El árbitro profundizó lo vivido luego del duelo del jueves en La Bombonera: "Fue muy desgastante todo. Prendía el teléfono y veía unas cosas que eran increíbles, impresionante. Otra gente de Vélez igual también me mandaba mensajes diciéndome que me quedara tranquilo, me decían quién era el que filtraba mi teléfono en las redes. Sé que va a pasar rápido todo esto".
Por otra parte explicó: "Somos empleados de todos los equipos del fútbol argentino, me paga el sueldo Boca y me paga el sueldo Vélez. no voy a ir en beneficio de algún equipo. Se está generalizando que un error nuestro es para beneficiar a un equipo o otro. Es más fácil verlo desde una cámara lateral, yo estoy por detrás de Mas y me tapa. No es un error sino que no lo veo".
Para finalizar, Espinoza expresó: "Si yo me equivoco y después no trabajo, no sumo en mi sueldo. No voy a equivocarme a propósito porque no sumo a mi sueldo. Yo estaba en una posición que no puedo observar".