El histórico contador de los Kirchner brindó una entrevista donde contó detalles de su trabajo
"No quiero tener más secretos que guardar". Víctor Manzanares, histórico contador de la familia Kirchner, reveló cómo trasladaba valijas que describió como "gigantescas" desde el aeropuerto de Río Gallegos hasta la casa de los padres de Néstor Kirchner. Y estimó el monto de cada bulto en dos millones de dólares.
Manzanares, arrepentido en el marco de una de las causas derivadas de los cuadernos de la corrupción, la que investiga el lavado de dinero de Daniel Muñoz, fue excarcelado la semana pasada por orden del juez federal Ariel Lijo y continúa con prisión preventiva por la causa Los Sauces.
Fuera de la cárcel, pero bajo custodia como parte del programa de testigos e imputados protegidos, concedió una entrevista a Nicolás Wiñazki en TN, en la que explicó por qué no pidió la excarcelación como arrepentido en la causa de los cuadernos: "Entiendo que tengo que ir pagando mi pena. La prisión preventiva es un cómputo como pena anticipada y prefería cumplir toda la pena y no salir y después volver a ingresar al penal". Y remarcó que la decisión responde a su preferencia a "vivir todo el tiempo de recuperación social sin ningún tipo de interrupción".
Luego Manzanares contó cuándo y por qué decidió declarar como arrepentido contra los Kirchner. "Fue en enero de 2018 y las razones tienen que ver con la falta de consideración de la que yo era objeto".
Además, dio detalles sobre los movimientos de dinero de la corrupción que son investigados por la Justicia. "Yo llevé dinero desde el aeropuerto de Río Gallegos hasta la casa de los padres de Néstor Kirchner. Eran dos valijas gigantescas, de las más grandes", contó.
Si bien dijo que Muñoz era "muy cauto" -"no me decía cuánto iba ni qué iba ahí", el histórico contador del ex matrimonio presidencial pudo determinar el monto. "Por cada viaje sacaba 2 millones de dólares y también tenía depósitos en Buenos Aires", dijo.
"Las valijas tendrían más o menos 1,10 metros de altura. Yo no las tanteaba, las subían al baúl del auto desde la pista de Río Gallegos y Daniel (Muñoz) se encargaba de bajarlas", añadió.