El aficionado afirmó que todo cuanto sabe de máquinas voladoras lo aprendió viendo videos de televisión y mirando planos de aeronaves en línea.
Un pakistaní, vendedor de palomitas de maíz, logró construir un avión de diseño propio con las piezas de un 'rickshaw' y un cortacésped. Su modelo llamó la atención de la Fuerza Aérea del país, informa AFP.
De acuerdo con la agencia, Muhammad Fayyaz, de 32 años, soñaba con unirse a la Fuerza Aérea desde que era niño, pero su padre murió cuando él todavía estaba en la escuela, lo que lo obligó a abandonar el octavo grado y hacer trabajos ocasionales para alimentar a su madre y sus cinco hermanos menores.
El joven, oriundo del pueblo de Arifwala, trabajaba de día como vendedor de palomitas de maíz y como guardia de seguridad de noche, y guardaba todo el dinero que podía para realizar su sueño de la infancia y construir un avión. Para ese fin, incluso, tuvo que vender un terreno familiar y obtener un préstamo de 50.000 rupias (unos 350 dólares), que aún está pagando.
Lo más sorprendente es que Fayyaz aprendió a construir su máquina voladora viendo videos de televisión y mirando planos de aeronaves en línea. Allí conoció lo que son el empuje, la presión del aire, el torque y la propulsión.
Su aeronave está hecha con materiales inimaginables para la aviación. Así, el motor lo tomó de un cortacésped, las alas están hechas de arpillera y las ruedas fueron antes de un 'rickshaw'.
El primer vuelo tuvo lugar en febrero. Fayyaz afirma que sus amigos lo ayudaron a bloquear una pequeña carretera, que usó como pista para despegar. Según comentó a AFP un amigo suyo, el artefacto volador alcanzó los 120 kilómetros por hora antes de despegar, se elevó entre 600 y 700 centímetros sobre la tierra y voló una distancia de dos a tres kilómetros antes de aterrizar con éxito.
El creador de la aeronave decidió repetir su intento el 23 de marzo, Día Nacional de Pakistán, delante una multitud, pero fue arrestado y le confiscaron el avión, que, según la Policía, representaba una amenaza para la seguridad. Luego un tribunal liberó al ingeniero aficionado tras el pago de una multa de 3.000 rupias (43 dólares), y el 4 de abril le devolvieron su aeronave. Los oficiales detallaron entonces que podría hacerla volar libremente si obtenía una licencia o permiso de vuelo.
A partir de entonces, representantes de la Fuerza Aérea de Pakistán se han hecho presentes ya dos veces para conocer el avión y a su creador, a quien le dieron un certificado que elogia su "pasión y destreza" al construir lo que describieron como un "mini avión básico".