El equipo de Pochettino remontó un 0-2 ante Ajax, se impuso por 3 a 2 en el descuento y definirá el título ante Liverpool.
Histórica, épica, soñada. Así fue la clasificación a la final de la Champions League que Tottenham Hotspurs logró hoy ante Ajax en Amsterdam. El equipo que dirige Mauricio Pochettino ganó 3-2 tras revertir una semifinal increíble y accedió al encuentro decisivo de aquel torneo, donde se medirá con otro equipo inglés, Liverpool, el primero de junio en Madrid.
El brasileño Lucas Moura fue el gran héroe del equipo londinense, porque fue el autor del triplete con el que Tottenham logró recuperarse del 2-0 en contra con el que se marchó al descanso.
No se dio por vencido el conjunto inglés, luchó hasta el final después de un primer tiempo desvaforable y con un cinematográfico gol en tiempo adicionado logró acceder por primera vez en su historia a una final de la Champions League.
El equipo de Amsterdam, que tuvo entre sus titulares a Nicolás Tagliafico, pareció liquidar la serie en el primer tiempo, cuando extendió la ventaja de 1-0 lograda como visitante en el juego de ida, con un cabezazo de Matthijs de Ligt a los cinco minutos de juego y un zurdazo del marroquí Hakim Ziyech, a los 34.
Fue una estapa inicial casi soñada para Ajax, que controló el juego y expuso sus mejores virtudes ofensivas ante un conjunto inglés con buenas ideas ofensivas pero con poca resolución.
Con la intención de lograr mayor peso en el área contraria, Pochettino envió a la cancha en el inicio del complemento al español Fernando Llorente y el espíritu de su equipo se modificó.
A los 10 minutos, Lucas Moura le dio vida a Tottenham con el descuento. Cuatro minutos después, el delantero brasileño no perdonó un error del arquero local, el camerunés André Onana, y estableció el empate.
La semifinal definitivamente volvió a estar abierta, y seguramente más de un hincha de Ajax pensó en la diferencia que desperdició Barcelona en la otra semifinal ante Liverpool.
Pochettino terminó de jugársela por completo con poco menos de diez minutos por delante, con el ingreso del argentino Erik Lamela (Paulo Gazzaniga y Juan Foyth fueron suplentes).
Tottenham se exigió al máximo y lo tuvo dos veces, con un cabezazo al travesaño de Jan Vertonghen y un disparo débil de ese defensor belga, en la misma jugada, que despejó en la línea un defensor local.
Ajax, que contó con varias situaciones para sentenciar el juego, como un tiro en el palo de Ziyech, resistió y cuidó la diferencia en el global con Lisandro Magallán en cancha en los últimos minutos.
Pero para la última jugada estaba reservada la resolución de la llave. Moura se encontró con la pelota de su vida dentro del área, a los 50 del complemento, y con un zurdazo cruzado ante la presencia de Tagliafico que Onana no pudo rechazar hizo estallar al banco del conjunto inglés y echó por tierra los sueños de Ajax.
La Champions League entregó dos semifinales dramáticas en cuanto a su resolución. Liverpool y Tottenham definirán en el estadio Wanda Metropolitano cuál de los dos equipos es el mejor de la temporada en Europa.