Una mujer de 41 años es investigada en Estados Unidos tras ser acusada de 21 cargos de delitos sexuales.
Una mujer de 41 años podría terminar en prisión si la encuentran culpable de haber abusado de dos adolescentes que eran novios de sus hijas. Todo comenzó en el 2017 cuando uno de los menores, que en ese momento tenía 15 años, llamó a la policía de California para denunciar que había tenido una "relación inapropiada" con la madre de su novia.
La policía comenzó con la pesquisa y, para su asombro, pudieron comprobar que otro menor, de 14 años, también había pasado por la misma situación y coincidida con la primera víctima en ser novio de otra de las hijas de la agresora sexual.
En el 2018 Coral Lytle, casada y con cuatro hijos, fue acusada de 21 cargos de delitos sexuales tras comprobarse que manejaba 24 kilómetros desde Tulare hacia Visalia para tener encuentros sexuales con los chicos. En esas situaciones les daba cigarrillos, alcohol y material pornográfico.
Durante la investigación preliminar, en donde los chicos abusados contaron detalles de los encuentros, el juez Brett Alldredge dio una sentencia de tres años de prisión. Al no reconocer sus crímenes, para tratar de avanzar en el juicio, otro magistrado le propuso que si se declaraba culpable y recibiría una pena de seis años de libertad condicional.
Esto fue aceptado por la mujer, y días antes de que quedara firme la sentencia, el magistrado decidió revisar el acuerdo así que el futuro de Lytle quedó en suspenso.
Fuente: La Nación