El británico de Honda, último ganador en Termas y el australiano de Ducati arribaron a Santiago en la siesta de este miércoles.
Más pilotos llegan a Las Termas de Río Hondo de cara a la segunda carrera del año del Gran Premio de MotoGP Argentina 2019.
Cal Crutchlow, piloto de Honda arribó en la siesta de este miércoles de muy buen ánimo, ya que viene de lograr podio (3°) en Qatar. Además es el último ganador en nuestra provincia.
"Estoy sin palabras. Fue una sorpresa, no lo esperábamos. Y también un gran alivio, porque he demostrado que puedo volver a pilotar siendo competitivo. Mis brazos estuvieron un poco doloridos durante el fin de semana, pero en la carrera me sentí bien. Me sentí realmente muy bien" había destacado el británico en Qatar.
Cabe destacar que Crutchlow volvió a las pistas este año tras su accidente en la segunda tanda de libres de Phillip Island el pasado octubre. El británico sufrió rotura en el maléolo, astrágalo y extremo distal de la tibia.
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A mejorar lo de la primera fecha
Otro de los que también llegó a Las Termas de Río Hondo, fue el australiano Jack Miller, quien no tuvo una muy buena actuación en la primera carrera del Mundial de Motociclismo.
El piloto de Ducati a pesar de un buen comienzo de carrera, protagonizó uno de los momentos más curiosos en la pista y finalizó fuera del top ten.
Miller arrancaba cuarto en parrilla, cruzó segundo la línea de meta en el primer giro, peleando con los de delante, pero en la segunda vuelta de carrera, inesperadamente, empezó a perder posiciones.
Entonces se pudo ver como el australiano levantaba su cuerpo de la moto y con la mano derecha arrancaba el asiento de su sillín, lanzándolo para atrás. A partir de ahí, pasó 11º en la segunda vuelta, y 12º en la 3 y 4. Miller logró recuperarse momentáneamente, llegando al top10 en la vuelta 10, antes de, definitivamente, retirarse en el giro 13, cuando iba 11º.
“El asiento está pegado al bastidor auxiliar, que está pintado y, al parecer, la pintura no estaba bien fijada. El pegamento que mantiene el asiento no aguantó y se movió con la pintura”, explicó Miller al final de la carrera.
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