El expresidente brasileño Michel Temer fue arrestado en el marco del amplio proceso anticorrupción conocido como "Lava Jato"
El ex presidente brasileño Michel Temer fue detenido este jueves, acusado de corrupción en una causa en la que se investiga el pago de sobornos en 2014 a miembros de su partido, vinculados a la construcción de la central nuclear Angra 3, en Río de Janeiro.
La decisión fue tomada por el juez Marcelo Bretas, considerado el brazo de la operación Lava Jato en Río de Janeiro, que también capturó a Wellington Moreira Franco, ex gobernador de Río y ex ministro de Energía.
"Mi detención es una barbaridad", dijo Temer, cacique histórico del Movimiento de la Democracia Brasileña (MDB), mientras era llevado por la Policía Federal desde San Pablo a Río de Janeiro, en diálogo con el periodista y analista político Kennedy Alencar, de radio CBN.
Es que la orden de arresto es una prisión preventiva, es decir, en el inicio del proceso, sin que exista condena.
Temer es el segundo ex presidente preso, luego de que el 7 de abril de 2018 fuera arrestado el condenado Luiz Inácio Lula da Silva.
La prisión de Temer está basada en la delación premiada del empresario de la constructora Engevix José Antunes, en la causa por corrupción en Eletronuclear.
"Esta detención es una demostración de fuerza de Lava Jato", explicó el principal columnista del grupo Globo, Merval Pereira.
Es que el Supremo Tribunal Federal (STF, corte suprema) le recortó los poderes especiales que tenía la Lava Jato en los últimos tiempos, mientras el ex juez Sérgio Moro, actual ministro de Justicia, se encuentra en una dura puja con el yerno del hoy detenido Moreira Franco, el presidente de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia.
Abogado constitucionalista, Temer fue presidente hasta el 1 de enero pasado, luego de haber sido vicepresidente de Dilma Rousseff, a la cual traicionó en 2016 y se pasó a la oposición para realizarle un juicio polìtico que la destituyó del cargo.
Se esperaba que la defensa de Temer presentara un hábeas corpus a la máxima corte para lograr la libertad, aunque el juez Bretas, en su pedido de captura, considera a Temer el "jefe de una organización criminal".
El asunto en cuestión son unos 300.000 dólares que según el juez recibió el ex policía Luis Lima, considerado testaferro de Temer, como parte de un soborno a cambio del apoyo del MDB para el ingreso de Engevix a la construcción de Angra 3.
El dinero supuestamente iba a ir a las arcas del MDB en forma ilegal, pero según Bretas fue para asuntos privados -reforma de una casa- de una de las hijas de Temer, Maristella.
El impacto político es grande porque la operación Lava Jato venía sufriendo críticas y reveses en el STF, que el próximo 10 de abril debe decidir un fallo clave que puede permitir la liberación de Lula, condenado en dos instancias.
Bretas, un magistrado famoso porque se lo considera un imitador del estilo de Moro, consideró que Temer y Moreira eran "un riesgo para el orden público" y que por eso los detuvo, igual que al ex policia Lima y a otras siete personas.
Temer, de 78 años, fue llevado desde su casa en el barrio Alto de Pinheiros hasta el aeropouerto internacional de Guarulhos, desde donde fue llevado a Río de Janeiro.
Quien fue detenido en el aeropuerto de Río mientras regresaba al país fue Moreira Franco, ex ministro y encargado de las privatizaciones del gobierno de Temer.
Moreira es el quinto ex gobernador de Río de Janeiro preso por corrupción.
El MDB es el antiguo PMDB, que es el partido principalmente involucrado en la operación Lava Jato.
Desde el PT de Rousseff, que se convirtió en oposición a Temer, pidieron cautela. Lo hizo el ex jefe de gabinete Jacques Wagner: "Me preocupa ese ambiente de caza de brujas".
Varios líderes del PMDB aliados de Temer ya están presos: el ex asesor Rodrigo Rocha Loures y el ex titular de Diputados Eduardo Cunha, articulador del juicio polìtico a Rousseff, además del ex gobernador de Rio Sergio Cabral.