La potencia de su motor es veinte veces superior a la de un Ford Fiesta. Su comprador no quiso ser identificado y se cree que pagó más de 10 millones de dólares.
El fabricante de automóviles francés Bugatti presentó este miércoles el vehículo más caro del mundo, vendido a un cliente cuyo nombre no fue revelado por al menos US$11 millones, sin incluir impuestos.
El precio exacto no se hará público, pero se cree que supera el anterior récord registrado: la compra del Sweptail de Rolls-Royce, estimada por medios especializados en al menos US$10 millones.
Con una potencia de motor veinte veces superior a la de un Ford Fiesta, el llamado "La Voiture Noire" (El Automóvil Negro, en una traducción literal del francés) fue fabricado para celebrar el 110º aniversario de Bugatti.
Se cree que el nieto del fundador de Porsche, el magnate austríaco Ferdinand Piech, es el comprador.
Piech es el ex jefe ejecutivo de Volkswagen, dueña de Bugatti. Durante su mandato, se ganó la reputación de apoyar algunos de los proyectos de desarrollo más costosos del grupo automovilístico.
Sin embargo, Bugatti sólo mencionó que el comprador es "un entusiasta de la marca", una de las más valoradas en la industria del motor.
El presidente de Bugatti, Stephan Winkelmann, destacó que La Voiture Noire combina una "tecnología y estética extraordinaria" junto al "lujo extremo".
El nuevo modelo tiene una carrocería de fibra de carbono, 1.500 CV y un propulsor de gasolina de ocho litros y 16 cilindros.
Bugatti no ha precisado la velocidad que puede alcanzar su nuevo vehículo, pero sus características son similares a otras increíbles piezas de ingeniería de la firma, como el Chiron.
El Chiron es capaz de acelerar de 0 a 100km/h en 2,4 segundos y puede alcanzar una velocidad máxima de 400 km/h.
La Voiture Noire, según Bugatti, es un homenaje a su legendario Type 57 SC Atlantic.
Solo se fabricaron cuatro unidades de este modelo, entre 1936 y 1938, y el diseñador de moda Ralph Lauren es el dueño del último de ellos.