La automotriz alemana producía la camioneta compacta Vito en su planta de Virrey del Pino. Ahora piensa dirigir recursos hacia una nueva versión de la Sprinter.
Cuatro años atrás, Mercedes-Benz Argentina inició en el país la producción de la Vito, una camioneta cerrada que fue vista como la "hermana menor" de la van Sprinter.
Hoy, la cruda realidad del sector automotor argentino, que padece por el desplome de las ventas en el mercado interno, llevó a la firma alemana a tomar una decisión drástica: el cierre de la línea de producción de la Vito.
En concreto, las ventas del vehículo no cumplieron con las expectativas en la Argentina, pero tampoco en Brasil, que recién sale de una profunda recesión.
Mercedes-Benz entregó solo 262 unidades en 2015, 1.366 en 2016, 1.626 en 2017 y 1.384 en 2018, según detalla el portal Autoblog.
Los empleados que armaban la Vito serán trasladados a la línea de la Sprinter, cuya demanda está en alza en Brasil.
De hecho, desde la fábrica de Virrey del Pino afirman que durante 2018 se exportaron 10.384 Sprinter al mercado brasileño, un aumento del 56% con respecto a 2017.
En tanto, la firma está puliendo los detalles de una nueva generación de Sprinter que comenzará a producirse a mediados de año.