Un acuerdo permitió detener el procedimiento preventivo de crisis, aunque a cambio se acordó despedir a 32 empleados de la empresa Femsa-Coca Cola.
Tras un acuerdo con la empresa y el sindicato, el Gobierno decidió este viernes no abrir el procedimiento preventivo de crisis (PPC) que pidió Coca Cola-Femsa la semana pasada para su planta en Pompeya, que produce y distribuye gaseosas.
Así lo confirmaron fuentes oficiales al diario La Nación, que agregaron que se llegó a un acuerdo que prevé 32 despidos (la empresa buscaba que fueran 75) y que se pague el 100% de la indemnización. De esa manera, el PPC no será abierto, dijeron en Producción y Trabajo. Se trata de un pequeño logro político para el Gobierno, que se evita de esa manera rotular con el término "crisis" a las dificultades de un sector productivo.
Al momento del pedido del PPC, la empresa justificó en un comunicado que "Coca Cola-Femsa Argentina está atravesando una etapa compleja debido a la desaceleración del consumo, lo que la ha colocado en la necesidad de readecuar su estructura de trabajo".