Este miércoles por la mañana prestarán declaración en los Tribunales de Mar del Plata frente a la fiscal Florencia Salas.
Cinco jóvenes marplatenses, todos de entre 21 y 23 años, están acusados de violar a una menor de 14 años en un camping de la ciudad de Miramar, durante la madrugada de Año Nuevo. Este miércoles por la mañana el grupo prestará declaración en los Tribunales de Mar del Plata frente a la fiscal del caso, Florencia Salas. A última hora de ayer, según pudo saber Infobae tras conocerse los resultados de los exámenes médicos, todos habrían sido imputados por el delito de "abuso sexual con acceso carnal agravado".
Los acusados son Lucas Leonel Pitman (21), Tomás Agustín Jaime (23), Juan Cruz Villalba (23), Mariano Manuel Díaz (23) y Roberto Fabián Costa (21), al igual que la víctima y su familia, todos oriundos de la ciudad de Mar del Plata.
El grupo de cinco amigos recorrió en la Traffic blanca que Díaz usa para realizar fletes los 100 kilómetros que separan Mar del Plata de Miramar, para recibir el 2019 brindando juntos. Como muchos marplatenses en esta época del año, habían decidido cambiar una ciudad invadida por el turismo y el ruido por un plan alternativo.
Pasaron la noche de Año Nuevo en el camping El Durazno de Miramar, ubicado en el kilómetro 1 de la Ruta 11, un complejo tradicional de la ciudad costera, con precios accesibles, bungalows, parrillas y una pileta, que vieron como el lugar ideal para pelear contra el calor sofocante de las últimas horas de diciembre.
Cuando llegó la medianoche del martes el camping era un ir y venir de desconocidos que brindaban unos con otros y se sonreían a la distancia deseándose un feliz año, aunque apenas tuvieran en común la cinta de papel alrededor de sus muñecas, única identificación y medida de seguridad de los huéspedes de El Durazno.
"No hay seguridad", aseguró una fuente cercana al camping que hoy está en el ojo de la tormenta y agregó que la mayoría de las personas van sólo a pasar el día ahí. Entre los que recibían el año en el predio el martes pasado estaba además del grupo de amigos, un matrimonio también de Mar del Plata, junto a su hija de 14 años.
Fue entrada la madrugada que la madre de la adolescente, al advertir que hacía mucho tiempo que no veía a su hija, comenzó a buscarla por el complejo. La encontró en la zona de carpas, según precisaron fuentes cercanas a la investigación "en un estado deplorable", aunque no quisieron dar detalles a partir de la situación de vulnerabilidad de la menor. Los cinco jóvenes estaban junto a ella.
La mujer comenzó entonces en medio de una crisis de nervios a llamar desesperada y a los gritos a su marido, mientras otras personas alertadas por la escena se acercaban a la carpa en la que cada vez se juntaba más gente. La menor dijo que había sido violada por el grupo.
Tras mucha confusión, corridas y la llegada de la policía al lugar, la fiscal de la UFI Descentralizada de Miramar, Florencia Salas, dispuso que se realizaran exámenes médicos a todos los involucrados, incluidas las pericias sobre las prendas íntimas que llevaban puestas tanto la menor de 14 años como los cinco acusados.
En las últimas horas de ayer martes fuentes judiciales dejaron saber que la representante del Ministerio Público dispuso la aprehensión de los cinco jóvenes, ahora imputados por el delito de "abuso sexual con acceso carnal agravado".
Pitman, Costa y Díaz acostumbraban hacer surf juntos. Díaz además se desempeña como guitarrista de la banda de reggae RM2 y es el dueño de la Traffic blanca en la que el grupo había viajado desde Mar del Plata a Miramar y que quedó estacionada junto a la carpa donde habría ocurrido la violación.
Algunos de los involucrados además habían sido jugadores de rugby en el club Bigua de Mar del Plata, una institución con más de 67 años de historia en La Feliz. Pitman, que estuvo en sus filas y se declaraba fanático del equipo, también había realizado al menos el curso para ser guardavidas en La Feliz.
Los cinco jóvenes pasaron la noche en la Unidad Penal 44 de Batán, para ser trasladados a primera hora a los Tribunales marplatenses. A pesar del gran hermetismo con el que se maneja la Justicia, algunas fuentes dejaron saber en relación a la víctima, que tanto ella como su familia debieron recibir inmediata atención psicológica tras lo ocurrido.