X
Espectaculos

Barby Silenzi: "Fui a la Justicia porque con Francisco tenemos mucho para solucionar"

Nunca pudieron llegar a un arreglo y los focos de incendio cada tanto aparecen entre los padres de Elena. Sin embargo, nunca habían llegado al punto del último enfrentamiento. La bailarina le reclama mas dinero y un régimen de visitas.

11/11/2018

Tras haber quedado eliminada del Bailando, certamen en el que pasó sin pena ni gloria (fue la primera que quedó afuera), la incertidumbre laboral se apoderó de Barby Silenzi (34). Esperó todo el año para tener su oportunidad y en la primera gala la gente le dio la espalda. Sin tiempo para llorar por los rincones, la morocha levantó la cabeza para enfocarse en lo que viene. Las propuestas para hacer teatro el próximo verano empezaron a llegar y sólo le falta definir qué rumbo tomará. Es una de las bailarinas más requeridas y, seguramente, las principales compañías posarán los ojos en ella. Mientras tanto, las principales noticias en torno a una de las diosas del país pasa por el lado del corazón.
 
¡Poliamor! Desde que saltó a los medios y su nombre empezó a sonar, los hombres no tardaron en hacer fila con la intención de conquistarla. Sin embargo, no logra dar con el indicado. En el horizonte aparece el Polaco. Desde hace poco más de un año el rumor suena con fuerza y dice que entre ellos hay algo más que una simple amistad. El fuego entre ellos se apagó cuando el cantante conoció a Silvina Luna pero, con este romance finalizado, el hombre volvió a la carga. Suelen ir a comer juntos, y ella hasta le prestaba el departamento para que él fuera a bañarse luego de los ensayos del Bailando. Los regalos por parte de él también están a la orden del día. Las pruebas parecieran afirmar lo que es un secreto a voces, pero los protagonistas no se hacen cargo.
 
“Con el Polaco somos así. Me hace regalos, vamos a comer, nos divertimos… pero somos amigos. Nos une una amistad hermosa. No soy de las que apuestan a una amistad con derechos, porque estoy en un momento de mi vida en el que si estoy con alguien quiero que sea bien, no a medias”, dice ella.

 De todos modos, mientras el cantante estira el trámite, la bailarina empieza a mirar para otro lado. En julio de este año, el actor Rodrigo Noya se separó de la madre de su hijo y los cañones apuntaron a Silenzi como la tercera en discordia. Ellos se conocieron mientras hacían la obra Hansel y Gretel, y allí habría surgido el chispazo. Si bien ellos lo niegan, Sofía Sorrenti, ex de Noya, les cuenta a sus amigas que se separaron por culpa de Barby. “Veníamos mal, pero la relación que tiene él con ella fue demasiado. Vi la foto que se sacaron juntos, y la verdad que si son amigos, yo no recibo a mis amigos vestida así”, contó Sofía.

Ver esta publicación en Instagram

Good night @faustinalora

Una publicación compartida de Barby Silenzi (@barby_silenzi) el


Por su parte, la bailarina, al igual que lo hace con el Polaco, también habla de amistad. “Nos conocimos y enseguida nos hicimos amigos. Cuando yo lo conocí ya estaba separado. No tengo mucho más para agregar sobre nuestra relación”. Para tirar más leña al fuego, tan sólo alcanzó con el recital que brindó Shakira en el estadio de Vélez. La pareja disfrutó del recital de la colombiana y luego se fueron sonrientes, felices, con rumbo desconocido. Un escalón más abajo parece Tyago Griffo, a quien también cataloga como… sí, amigo. “Es mi tipo de hombre, pero sólo somos amigos. El año pasado pasamos momentos hermosos y aprendimos a querernos. No busquen donde no hay, es sólo eso, una amistad”.
 
Conflicto. Su gran amor fue Francisco Delgado. De esa relación nació Elena. Los cortocircuitos entre ellos no se disipan y siguen latentes. La crianza de la nena parece un punto en el que no se ponen de acuerdo. Ella le reclama que la ve poco y que el dinero que le pasa por mes no le alcanza. Del otro lado, Francisco le contestó, y el tema terminó con una demanda cruzada que parece ir para largo. “El se va a ir a vivir a México y no me pidió un régimen de visitas por Elena. Aparte, el dinero que me pasa no es por acuerdo judicial tampoco. En fin, tenemos muchas cosas que solucionar. Para arreglar todo eso acudí a la Justicia y el trámite ya está encaminado. La verdad es que todo lo que hago es para preservar a mi hija y ordenar su vida. Ella tiene que saber qué días está conmigo, qué días está con el papá, no puede ser que cambie según si el padre puede o no”.
 
Todoterreno. Lejos de los conflictos mediáticos, de los romances sin resolver, y de la discordia que mantiene con Delgado, Silenzi pone los pies sobre la tierra cuando habla de su hija. “Ella me cambió la vida y es mi gran amor. Muchas veces estoy cansada después de una jornada larga, y una sonrisa de ella me alcanza para darme fuerzas”. Más allá de tener una mujer que la ayuda, la morocha suele manejarse sola con la nena. Incluso, cuando puede la lleva a sus lugares de trabajo. “El día a día es complicado, porque salgo de mi casa re cargada. La cartera, un bolsito, la mochila… esperar que el micro pase… pero el oficio de mamá me encanta, no lo cambio por nada”.