La policía investiga un ajuste de cuentas como móvil del crimen.
La rápida movilización de todo el personal policial en el Departamento de Seguridad Ciudadana N° 6 de Termas de Río Hondo permitió el esclarecimiento del homicidio ocurrido el último viernes, a la noche, en esa ciudad ciudad.
Cerca las 22.30, la Policía fue alertada de un hecho de sangre en el barrio Herrera El Alto. Edison Adrian Uriber Toloza, de 27 años, de nacionalidad colombiana, yacía en un charco de sangre en la vereda de una casa. Los testigos apuntaban como sospechosos a dos sujetos que se dieron a la fuga del lugar. Ambos agresores, en moto, tomaron direcciones distintas.
Uriber era trasladado de urgencia al Hospital Zonal, pero la gravedad de las heridas hicieron que perdiera la vida antes de que pudiera ser asistido. Enseguida la Policía puso en marcha sus puestos de reducción de velocidad en los accesos a la Ruta Nacional N° 9 y destinó al resto a rodear la ciudad y localizar a los individuos.
Paralelamente los uniformados de Inteligencia Criminal intentaban desentramar los datos e información que tenían en sus manos. Información de identidades y movimientos comerciales que surgían con la llegada de inmigrantes a la ciudad termal. La Policía tenía ya en sus manos el motivo y las identidades de quienes podrían ser los fugados.
Y la respuesta llegó en poco tiempo. El Puesto de Control Vehicular de la localidad de Chañar Pozo informaba a sus pares la detención del primer sospechoso. A bordo de una moto marca Yamaha, Carlos Guerrero, también colombiano, intentaba regresar a la ciudad Capital impune por el asesinato cometido.
Todos los indicios remarcaban que el móvil del crimen era el ajuste de cuentas y no el de robo. Pero la policía no quedaría con la fuga del segundo colombiano fugado. Cuanto más pasaban las horas, más información surgía y se afianzaba la identificación y localización de este sujeto.
Fue la División Delitos Comunes de la ciudad Capital, quienes dispusieron una vigilancia en la casa del segundo sospechoso. En la mañana de este sábado abordaron en su domicilio a Elvis Darío Gutiérrez, oriundo de Colombia, señalado como quien acompañaba a Guerrero en la muerte de Uriber.
Secuestraron desde esa vivienda del barrio Huaico Hondo teléfonos celulares, guantes, prendas de vestir y una moto que coincidía con la descripta por testigos.