El concurso contó con la participación de 15 candidatas, siendo una edición muy especial al tener una primera finalista trans, Paula Oliveira, quien ganó el tercer lugar.
La representante del Estado de Rondônia fue coronada en medio de la polémica y la molestia de algunas de sus contrincantes, sobre todo, por su colega de Rio Grande do Sul, a quien no le gustó para nada la decisión de los jueces.
“Ese trasero es de plástico, la banda es mía. Hoy he podido comprobar todo esto es una farsa”, gritaba la gaúcha, decepcionada al sentirse despojada del trono, en una actitud que infringe todas las reglas del candente evento.
El alboroto fue tan grande que el organizador de Miss Bumbum, Cacau Oliver, intentó calmar los ánimos, para entregarle la banda a Ellen Santana, quien se mostraba desconcertada por la actitud de Aline, pero a la vez feliz por su triunfo.
“Esto forma parte del concurso, pero es algo malo para ella (Aline Uva), aunque para nosotros también lo es”, mencionó Oliver.
Al final, Aline no tuvo otra opción más que devolverle la banda a la representante de Rondônia, quien no dejó de ser atacada hasta por los simpatizantes de la chica originaria de Rio Grande do Sul.
“Ellen es la campeona”, le gritaban, en alusión a Uva.
El concurso contó con la participación de 15 candidatas, quienes presumían entre 100 y 125 centímetros de cadera, siendo una edición muy especial al contar con la participación de la primera finalista trans, Paula Oliveira, quien se quedó con el tercer lugar.
“Fue un honor el haber participado en el concurso y llevar la cuestión LGBT para el mundo entero”, mencionó orgullosa la candidata del Amazonas.
Al ser la ganadora, Ellen Santana obtendrá algunos contratos publicitarios que le derivarán en unos $50 mil reales (alrededor de $13, 600 dólares).
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Con toda esta trifulca, el concurso Miss Bumbum llegó a su final, dejando atrás el tradicional concurso en el que las participantes presumen su voluptuoso trasero.