Querían rescatar a Marcelo Pinheiro Veiga. La policía paraguaya desbarató el operativo.
La policía paraguaya ha frustrado este miércoles un plan del Comando Vermelho, una de las organizaciones criminales más grandes de Brasil y América Latina, para volar una cárcel a las afueras de Asunción y rescatar a uno de sus líderes, Marcelo Pinheiro Veiga. Tres ciudadanos brasileños armados con fusiles de asalto fueron sorprendidos por las fuerzas de seguridad en una vivienda de la ciudad paraguaya de Presidente Franco, fronteriza con Argentina y Brasil. Los supuestos criminales recibieron a los agentes a tiros y estos respondieron abatiendo a los tres, que fallecieron. Según el Ministerio del Interior de Paraguay, pretendían usar un automóvil con 84 kilos de dinamita en gel para explotar la prisión de alta seguridad, situada a las afueras de Asunción.
Pinheiro Veiga, más conocido como Marcelo Piloto, está encarcelado desde hace casi un año en la capital paraguaya. El operativo que permitió abortar el atentado —siempre según la información oficial— fue el resultado de un seguimiento de las fuerzas de seguridad locales, que conocían el plan desde comienzos de octubre. Entonces ya hubo un primer intento y cinco personas fueron detenidas, entre ellas Marisa de Souza, supuesta pareja del narcotraficante.
“Además de daños materiales, se iba a producir un centenar de muertos en la Agrupación Especializada el centro en el que está encarcelado Pinheiro Veiga”, expuso el ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor Villamayor, en una rueda de prensa. La explosión, agregó, habría tenido una expansión de unos 250 metros de radio. El coche bomba fue trasladado hasta un descampado en las afueras de la capital y fue detonado en una plantación de soja.
El Comando Vermelho es, junto al Primer Comando da Cidade (PCC), una de las bandas criminales más grandes de Brasil y ha llevado su disputa con otros grupos más allá del gigante sudamericano: a los límites con Argentina y Paraguay, conocida por eso como Triple Frontera. Según las autoridades brasileñas, el grupo controla parte del tráfico de armas y drogas en la región desde cárceles de Río de Janeiro y desde favelas de la segunda mayor ciudad de Brasil.
El plan para atacar la cárcel más segura de Paraguay y rescatar a su líder antes de ser extraditado a Brasil, donde está prófugo de la Justicia desde 2007, es una muestra más de fuerza. Marcelo Piloto fue detenido el 13 de diciembre del año pasado en la ciudad de Encarnación —en el extremo sur del país hispanoamericano— en un operativo internacional en el que participaron Brasil, Paraguay y Estados Unidos. Tiene dos procesos judiciales abiertos en Paraguay, uno por homicidio doloso y otro por la fabricación de documentos falsos.
La Triple Frontera la zona de paso habitual de la pasta base de coca boliviana y precursores químicos que se trasladan hasta laboratorios cercanos a puertos para convertirla en cocaína que luego se envía a África y Europa. En abril del año pasado, hubo un gigantesco asalto a la sede de la empresa de caudales Prosegur en Ciudad del Este, donde participaron unos 60 hombres con ametralladoras. Se robaron 11 millones de euros, en el que fue considerado el golpe más grande de la historia de Paraguay. La Fiscalía lo atribuyó al PCC.