Era un cliente; luego de mantener relaciones sexuales, la golpeó hasta desmayarla y huyó.
Lamentablemente, no es una novedad el hecho de que las trabajadoras sexuales sean vulneradas por supuestos clientes. Sin embargo, la necesidad hace que la calle sea su lugar de trabajo cada noche, aún sabiendo el riesgo al que se exponen.
Este es el caso de Sara (nombre ficticio), una nueva víctima de violencia en la calle. Sara fue salvajemente agredida por uno de sus clientes, quien la maniató y golpeó hasta desmayarla, para luego dejarla tirada en el mismo lugar desde donde la encontró.
Todo ocurrió en la madrugada de este martes; en la zona de Irigoyen y Constitución. Allí paró un auto pidiendo por sus servicios. Luego de acordar el precio, el hombre de unoa 35 años, "lleno de joyas", la llevó a un domicilio donde luego de haber concretado el servicio, la ató, la hirió con un arma blanca y luego comenzó a golpearla bajo la amenaza: "Vos no me vas a denunciar porque te voy a matar, y además, nadie me va a encontrar".
Sara recuperó la consciencia mientras era arrojada del auto a la calle, en el mismo lugar desde donde la había contactado horas atrás. Llegó a su casa golpeada y con cadenas de oro en su cuello, cadenas que no eran de ella.
Hoy pide ayuda porque tiene miedo de volver a la calle a trabajar, pero es su trabajo, y vive de eso. Su voz se entrecorta por el llanto que le provoca reconocer su situación.