Tras un confuso episodio, la actriz hizo su aparición en el piso pero no le fue muy bien al ritmo de la música de Luis Miguel.
Justo antes de anunciar el ingreso de Esmeralda Mitre a la pista del Bailando, Marcelo Tinelli miró desconcertado a Fede Hoppe, quien le estaba indicando mediante señas que a la participante del certamen le había pasado algo.
"No sabemos qué está pasando. Se acaba de cortar y se encerró en el camarín", le dijo el productor a Tinelli. Sin dudarlo, el conductor subió hasta el primer piso para ver qué había ocurrido.
"No entres acá, qué papelón. Me raspé con una Gillette, la verdad es esa. No sé qué pasó, me lastimé. Estaba ahí y me lastimé", intentó explicarle la ex mujer de Darío Lopérfido, aunque el conductor pareció no comprender del todo.
"Estoy para bailar. Es un escándalo lo que ha sucedido… Pero nunca dije que no bailaba", aseguró Esmeralda.
Luego, sí, Tinelli hizo su clásica presentación y la participante ingresó al piso. Por supuesto, se refirió a lo sucedido el viernes pasado cuando se cruzó con parte del staff de Incorrectas, Agustina Kämpfer, Julieta Kemble y Nora Cárpena.
"De un momento a otro me empezaron a hacer bullying y yo veía que cada vez que decía algo se burlaban y se reían", dijo la actriz.
Sobre Kämpfer, indicó: "No tenía ninguna intención de meterme (con ella). Me da lástima porque creo que a veces en la vida hay errores, como cuando uno va en la ruta y comete un error y tiene la desgracia de que le pase algo. Ella se rió de mí y bueno…"
"Ella está imputada, no puede salir del país y quiso tratarme de ignorante y dijo que no sé lo que es estar imputada. Aparte de actriz estoy recibida en Letras y viví diez años con un político: si hay algo que sé es lo que es estar imputado o condenado. Ella está imputada, y para mí se han aprovechado de los pobres y eso es lo que más me duele", agregó.
"No soy fanática, porque el fanatismo es una desinteligencia absoluta. En este momento se están cometiendo muchísimos errores y ojalá lo saquen adelante por mi ideología…", concluyó.
A la hora de la verdad en la pista al ritmo de los hits de Luis Miguel, la actriz decepcionó. Laurita Fernández le puso cuatro puntos, Ángel de Brito tres y Marcelo Polino menos uno. Además, el BAR le restó un punto, por lo tanto se llevó un total de seis puntos.