El pedido para anular el caso fue rechazado por el juez federal, que volvió a defender la figura del arrepentido.
El juez federal Claudio Bonadio rechazó este martes el pedido de la ex presidenta Cristina Kirchner para anular la causa de los cuadernos. El magistrado defendió la figura del arrepentido como estrategia y la legalidad del comienzo de la causa.
"Los 22 imputados que hasta el momento optaron por ser arrepentidos lo hicieron con la asistencia de sus letrados que son 17 defensas diferentes. Por ello, parece poco serio entrometerse en las estrategias de defensa de otros imputados con sus abogados", sostuvo el juez.
El pedido para anular el caso lo había realizado el defensor Carlos Alberto Beraldi, y fue apoyado por otros acusados, como el ex secretario de la presidencia Oscar Parrilli, entre otros.
En la presentación, la defensa sostenía que la causa se inició con la violación de la intimidad del chofer Oscar Centeno, y hace mención a la conducta de su amigo Jorge Bacigalupo y el periodista de La Nación Diego Cabot, quienes develaron la información de los cuadernos a la que tuvieron acceso.
Pero Bonadio descartó ese planteo: "El particular interés de las partes por velar por la intimidad de Centeno choca con lo que establece el Código Penal en su artículo 73, pues la violación de secretos es un delito de acción privada, por lo que el único que puede denunciar e impulsar una causa por ello es el particular damnificado".
"La guarda de los secretos no es absoluta y el código justifica que sean develados con el propósito inequívoco de proteger un interés público, lo cual se encuentra presente en el caso de autos donde se investiga a funcionarios públicos", agregó.
Luego Bonadio descartó el cuestionamiento relacionado al fórum shopping. El juez insistió en la conexión del caso con el expediente de gas licuado. La causa "solo fue dotada de autonomía material por una cuestión de organización del trabajo y economía procesal, como puede leerse en las piezas pertinentes".
"Debe recordarse nuevamente que ante una nueva línea de investigación de causas conexas, lo lógico es formar un nuevo expediente para no paralizar o entorpecer el otro, más aún frente a una pesquisa compleja, como son las vinculadas a los funcionarios públicos que tuvieron los cargos máximos de la Nación", agregó.
Para Bonadio, "mantener todo en un expediente, habría eternizado el trámite del proceso y que no se logre llegar a buen puerto, la verdad, con la vitácora de la corrupción' de Oscar Bernardo Centeno'", sostuvo al dividir el caso en varios tramos.
Finalmente, Bonadio defendió la figura del arrepentido. "Resulta por lo menos llamativo el planteo de las defensas en torno a la decisión tomada por el nombrado y el resto de los imputados que han querido beneficiarse con las disposiciones de la ley 27.304", afirmó el juez en la resolución.
"Toda vez que no se verificó la violación de garantía alguna ni la comisión de un perjuicio cierto e irreparable, corresponde rechazar el planteo sostenido por las defensas", dijo el juez.