EE.UU - Alerta sanitaria. Todos los casos se registraron en el New Haven Green, un parque que rodea a la Universidad de Yale.
En tan sólo 24 horas en New Haven, Connecticut, más de 70 personas que habían consumido una poderosa droga, fueron atendidos por el sistema de urgencias de la ciudad por sobredosis. Pero decenas de ellas fueron en un mismo lugar: un reconocido e histórico parque de la ciudad, el New Haven Green, que bordea a la Universidad de Yale.
Las ambulancias no daban abasto. Iban y venían de un lado a otro. Adolescentes vomitando, desmayados, con convulsiones. La mayoría de ellos fueron llevados a hospitales. Pero al menos cinco de ellos se negaron a ser atendidos, pese al estado patético en el que se encontraban. El colmo fue una de ellas: debió ser trasladado tres veces hasta un centro médico.
El hecho ocurrió durante todo el miércoles y las autoridades creen que los jóvenes habían consumido una peligrosa y poderosísima droga que cada vez se extiende más entre los adictos: la K2, también conocida como marihuana sintética o spice.
La DEA le confirmó a las autoridades del Departamento de Emergencias del Hospital New Haven de Yale que la droga consumida por los pacientes contenía K2 mezclado con fentanilo, un opioide 50 veces más potente que la heroína. Era tal el estado de algunos de los jóvenes que cuando los médicos los medicaban con naloxone, éste no les generaba ninguna mejora en su organismo.
La marihuana sintética ha provocado en los últimos meses cientos de casos de sobredosis en los Estados Unidos. Algunos de esos casos terminaron en muertes. Es impredecible saber las consecuencias que tendrá una dosis de spice en el organismo. Y para "bajar" su efecto, los adictos consumen opioides. Un cóctel fatal.
"El mensaje debe ser muy claro para las personas, que sepan que cada vez que tomen una droga sintética, realmente no tienen idea, como lo hemos visto hoy, de lo que están tomando y cómo los afectará", indicó el oficial de policía David Hartman en diálogo con la cadena de noticias WTIC y quien formó parte de los operativos para detener a un sospechoso de haber provisto las dosis a las víctimas.
De acuerdo a The Washington Post, la mayoría de los pacientes que sufrieron la sobredosis del miércoles eran personas de bajos recursos y sin hogar.
Las autoridades comenzaron a preocuparse sobre el asunto cuando los primeros reportes indicaban que había seis personas con sobredosis en el mismo área al mismo tiempo. Cuando el número llegó a 30 la Policía de New Haven le recomendó a la población no acercarse a la zona y que no comprara K2 bajo ningún aspecto.
El jefe del Departamento de Bomberos del lugar, John Alston, fue llamado por la policía local para que ayudara en los operativos porque no daban abasto. Mientras ofrecía su conferencia de prensa para informar sobre el caso, era interrumpido constantemente y debía actualizar la información dada.
Una periodista que estaba en el lugar comenzó a tuitear: "Un nuevo caso"; "un caso más"; "acaban de informarme que otra persona…". "esto es increíble". Los mensajes estaban separados por minutos unos de otros.
"La sustancia detrás de estas sobredosis es altamente peligrosa y debe evitarse", dijo el gobernador de Connecticut Dannel Malloy, y agregó que los funcionarios estatales de salud pública habían entregado 50 dosis de naloxone a New Haven para reponer el suministro.
La marihuana sintética puede ser fumada o vaporizada en cigarrillos electrónicos. Y son realmente muy baratas. Una dosis puede llegar a costar apenas 2 dólares. Lo primero que causa es una aceleración cardíaca, vómitos y presión arterial.