Fue en la categoría peso pesados de Strelka. Ambos novatos midieron sus fuerzas y habilidades en la arena de las peleas callejeras.
Hace apenas días se celebró otra edición de Strelka, una especie de "El club de la pelea" ruso que le permite a cualquiera subirse a un ring de arena y tomarse a golpes bajo las reglas de las artes marciales mixtas.
Uno de los combates más curiosos se dio entre dos novatos, uno de ellos, de más de dos metros de altura, y otro que antes de comenzar se definió como "amante de la cerveza".
El emparejamiento entre ambos se decidió por el peso y la inexperiencia. Si bien el grandote había luchado en su adolescencia, hacía años que no entrenaba, mientras que su contrincante jamás había incursionado en las peleas de este estilo y quería dejar de ser un aficionado.
El final no sorprendió a nadie. En menos de un minuto, el "amante de la cerveza" se rindió tras una toma de la que no pudo zafar.