El sujeto prometía la adjudicación de viviendas a cambio de $10 mil pesos. El requisito era depositarle, en mano, entre $8.000 y $10.000, deslizaron desde esferas judiciales.
Un funcionario policial fue detenido por efectivos de la División Delitos Económicos tras ser acusado de estafar a varias familias pidiéndoles hasta $ 10.000 a cambio de gestionarles viviendas del IPVU.
Trascendió que el policía habría sido identificado como David Coronel, con domicilio en La Banda, cuya base de operaciones era una estación de servicios a la vera de la autopista.
El delito enrostrado sería "estafa" y la calculadora policial anoche trabajaba, incansable, estimando el monto de la defraudación en varias decenas de miles de pesos.
Los investigadores pusieron primera en la causa cuando cuatro víctimas se presentaron en el "búnker" policial y relataron con lujo de detalles cómo funcionaba la estructura de Coronel, deduciéndose que aún hay "eslabones" sueltos.
Aquel que necesitaba una casa llegaba a Coronel. El requisito era depositarle, en mano, entre $8.000 y $10.000, deslizaron desde esferas judiciales.
Acto seguido, el funcionario les brindaba un número de una cuenta supuestamente del Instituto Provincial de Vivienda y Urbanismo para que el estafado creyera que el trámite adquiría ribetes de cuasi legalidad.
Grande fue la sorpresa en el Ipvu, con los cuatro sujetos que desembolsaron cada uno $10.000 y que querían saber del estado de sus "trámites". El desconcierto se acentuó, ya que los damnificados juraban y perjuraban que también depositaron otros tantos pesos en la tan mentada cuenta detallada por el policía.
El acusado será indagado en los próximos días y quizás allí se conozcan más detalles de la operatoria.