Había sufrido cinco ACV. Debido a su delicado estado de salud, su mujer, Nora Cárpena, había planteado el tema de la eutanasia en televisión.
Su popularidad quedó anclada en los años 60 o 70. Cuando la TV o las entonces vigentes “fotonovelas” lo instalaron en la categoría de los galanes de época, de la que se marchó muy pronto. No así de la actuación, que mantuvo hasta fines de los 80 cuando asomó su otra veta, la de productor, en la que también fue un triunfador hasta que el cuerpo le dijo basta.
Como actor, productor, director o maestro ─tuvo su propia escuela de formación de artistas─ Guillermo Bredeston fue una figura relevante del espectáculo en la Argentina. Y formó con Nora Cárpena la que se vio primero como una “dupla mediática”, pero que se consolidó como un romance indestructible hasta sus últimos días.
El ACV que Bredeston sufrió en abril de 2011 significó una despedida prematura, sólo quedaba el sufrimiento posterior. Hasta el final, que se produjo esta tarde y fue confirmado por Carlos Rottemberg través de la cuenta de Twitter Multiteatro Comafi.
Esta casa teatral despide al gran amigo. Murió Guillermo Bredeston.
— Multiteatro Comafi (@multiteatro) 28 de julio de 2018
Enormes abrazos a Nora, Lorena, Nachi y a la numerosa familia que ha sabido formar.
Guillermo ha sido un enorme profesional. De su hombría de bien podemos dar fe quienes lo conocimos, tratamos y queremos
No se olvidarían allí los momentos tan gratos, esos que disfrutaron miles de espectadores en el teatro y millones de televidentes, principalmente en la comedia. Y algunos toques de escándalo, infaltables en las figuras populares, pero que igual rara vez irían asociados al nombre de Bredeston.
Su pasión por la actuación venía de su infancia, de su tierra entrerriana. Nacido el 24 de agosto de 1934 en Concepción del Uruguay, era hijo de un empleado de correos que también dirigía teatro como hobby. Bredeston contó que siendo él mismo muy chico formó su grupo de títeres y, junto a su hermano y algunos vecinos, y montaron un circo en el fondo de su casa.
Recordaba su debut teatral en "1810, en mi ciudad, era una obra del uruguayo Osiris Rodríguez Castillo, quien vino a dirigirla. Y también me dirigió mi padre en 'La ley oculta' y 'Justicia de antaño’, de Martín Coronado. Ensayábamos mucho tiempo, era una de las cosas más lindas cuando mi padre formaba un elenco. Pero se trataba de una actividad vocacional, no comercial, ni mucho menos".
El primer contacto con el espectáculo de Buenos Aires se dio a fines de los 40, cuando Oscar Ponferrada y un grupo de actores llegaron a Entre Ríos. "Algunos me propusieron ingresar al seminario de Arte Dramático, en el Cervantes. Y allí fui, con todos mis sueños, aunque en principio parecía una locura".
Despido con mucha tristeza al gran GUILLERMO BREDESTON. Amigo glorioso, gran creador de éxitos televisivos, teatrales. Núnca olvidaré su voz cuando me llamó para Brujas. Yo me iba por un tiempo del país y su llamado me retuvo.
— Moria Casán (@Moria_Casan) 28 de julio de 2018
Bredeston podía imaginarse en los roles dramáticos, pero finalmente se encaminó a la comedia.Fue “galán” de las grandes figuras de los 60 y 70 (Elsa Daniel, Gilda Lousek, una jovencísima Soledad Silveira). Y, por supuesto, Nora Cárpena, quien se convertiría en su esposa. Tuvo un breve paso por España, dirigido por Margarita Xirgu en "La dama boba". Pero Migré lo llamó para "Palmolive en el aire" y así regresó definitivamente a la TV argentina donde, uno de sus más recordados ciclos, fueron las comedias junto a Beatriz Taibo por Canal 9.
A principios de los 80 era uno de los productores más intensos del país: mientras mantenía su ciclo en TV con su esposa, inauguraba el teatro del Hermitage y montaba obras en el Lido, ambos en Mar del Plata, también conducía el Yolanda en Villa Carlos Paz y el Tabarís con Rottenberg. Sus elencos incluían a Sapag, Susana Giménez, Brandoni, Pepe Soriano, Emilio Disi, Arturo Puig. Y un joven llamado Ricardo Darín. “Soy un pionero en las temporadas de Mar del Plata, de aquella época en la que había una sola sala”, recordó.
Los retornos a la actuación fueron fugaces (con Satur y Bebán hicieron “los galanes peinan canas” en 2001, interpretándose a sí mismos, también ofició de presentador del espectáculo humorístico de Chico Novarro y_Emilio Disi, y en 2008 actuó en teatro en “La jaula de las locas”).
Pero todo iba quedando atrás. El primer aviso de una salud en declinación fue la operación del corazón, en 2004. Y luego, ese extenso y triste final, tras una larga agonía.
En una entrevista con la revista Pronto, hace poco menos de un año, Cárpena había abierto su corazón y, con mucho dolor, habló sobre el delicado estado de salud de marido: "Si Guillermo Bredeston pudiera hablar, pediría la eutanasia, no te quepa duda".
En 2011, Bredeston sufrió el primero de cinco ACV (Accidentes cerebrovasculares). A partir de allí, la vida del actor se fue transformando en una pesadilla. Postrado en su casa, sin poder hablar por una traqueotomía que le realizaron hace tres años y sin poder moverse, Nora contó en los medios el sufrimiento de su pareja en sus últimos años de vida.
"Soy realista. Ya no tengo esperanzas. Quiero que Guillermo sufra lo menos posible. Me gusta que me sonría, que me mire. Pero a veces lo veo conectado a esas máquinas y es difícil", decía Cárpena el año pasado.
Los últimos años de Bredeston fueron de mucho sacrificio para él y su familia. Además de ser atendido por enfermeros las 24 horas, el actor estaba con respirador y máquina de alimentos. Además, no hablaba porque tenía una traqueotomía.
Fuente: Clarín