La fuga de Luciano Hernán Fernández llegó a su fin este lunes. Estuvo escondido en el interior del departamento Río Hondo.
Luego de asesinar de un disparo en el pecho a Ricardo Gabriel Ocaranza de 10 años, Luciano Hernán Fernández emprendió una huida que se extendió hasta suelo santiagueño.
Policías de la provincia de Tucumán brindaron datos a sus pares de Santiago del Estero, en especial a los de Las Termas de Río Hondo, ya que tenían los indicios que estaba de paso por algunas localidades del interior del departamento Río Hondo.
Pero en su fuga no estaba solo.
Traía consigo a su pareja y a un hijo, pero debió dejarlos en la localidad de Vinará, ya que al saber que los policías estaban cerca de él, decidió seguir solo en su escape.
Personal policial de la Comisaría 50 realizaba recorridos por el centro de la ciudad, intuyendo que Fernández debería pasar por Ruta 9 para poder abandonar la ciudad.
Fue así que las tareas de vigilancia dieron sus frutos y fue interceptado cuando transitaba la mencionada vía en su motocicleta negra.
Detención
Al momento de ser interceptado el sujeto habría respondido con evasivas y no tenía en su poder alguna identificación. Pero entro los indicios brindados por la policía tucumana figuraban datos de la motocicleta en la que se desplazaba Fernández. Esto fue verificado en el momento y en el lugar: coincidían.
Este dato fue fundamental para que se tenga la certeza que se estaba ante el asesino del pequeño Ricardo Gabriel.
De inmediato se puso en conocimiento del Fiscal Rafael Zanni y el tucumano fue trasladado a la Comisaría 50, hasta tanto se realicen los trámites de rigor para que sea llevado a Tucumán.