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País

El abogado de Nahir Galarza pidió que siga detenida

Seguirá alojada en la comisaría de la Mujer y la Familia de esa ciudad entrerriana hasta al menos el próximo 16 de marzo.

02/03/2018

El juez de Garantías de Gualeguaychú Mario Figueroa hizo lugar a un pedido de la defensa para que Nahir Galarza, acusada de haber asesinado a su ex novio Fernando Pastorizzo el 29 de diciembre último, continúe por otros 12 días con prisión preventiva, informaron fuentes judiciales.

 El abogado José Ostolaza pidió que la joven continúe detenida por ahora debido a que él debe realizarse una intervención quirúrgica y no podrá estar en la audiencia de revisión de la prisión preventiva que vence el 4 de marzo próximo.

Los abogados querellantes Sebastián Arrechea, Juan Carlos Peragallo y Rubén Virué, y el fiscal a cargo de la causa, Sergio Rondoni Caffa, no se opusieron al pedido, por lo que el juez Figueroa dictará la nueva prisión preventiva a la imputada por 12 días en la próxima audiencia. 

Rechazan el pedido de una "autopsia psicológica" a Pastorizzo


Por otro lado, Figueroa rechazó el pedido de la defensa de Galarza de practicar una "autopsia psicológica" a Pastorizzo y de ingresar a la cuenta de Facebook del joven.


El primer procedimiento es un proceso de recolección de datos de la víctima para reconstruir su perfil psicológico y estado mental antes del deceso, donde participan médicos, abogados, psiquiatras y psicólogos forenses para definir la etiología médico legal en los casos de muertes dudosas, pero este no sería el caso.


El estudio busca reconstruir las últimas horas en la vida de una persona fallecida o desaparecida a través de entrevistas a las personas de su entorno y a quienes compartieron sus últimos días.


El fiscal y las querellas se opusieron ya que consideran que la defensa busca "ubicar a la víctima como responsable" del crimen, por lo que el juez rechazó el pedido.


El crimen fue cometido el 29 de diciembre cerca de las 5.30 en Gualeguaychú, donde Pastorizzo fue hallado malherido en la calle con un tiro a quemarropa en la espalda y con un segundo disparo en el pecho, y su moto y dos cascos tirados a su lado.


El joven murió poco después y si bien Galarza primero declaró como testigo y dijo que había visto por última vez a su ex novio la noche anterior, luego se fueron sumando pruebas que derivaron en que la chica terminara presentándose a la Justicia y confesara el crimen.


La joven tuvo una breve internación por su estado de shock y finalmente fue trasladada a una celda de la Comisaría del Menor y la Mujer, donde cumple la prisión preventiva.


El 16 de enero, la acusada aportó una nueva versión de los hechos en la que aseguró que los disparos que efectuó contra la víctima fueron "accidentales".


Intentó explicar que en la primera declaración como imputada había mentido porque temió que lo culpen a su padre policía, quien era el responsable de la pistola calibre 9 milímetros reglamentaria que se convirtió en el arma homicida.