Dos médicos gastroenterólogos coincidieron en señalar que se trata de un procedimiento "sencillo" y que la posibilidad de un desenlace fatal es "1 en 10.000".
La familia de Débora Pérez Volpin explicó ayer por la noche que la legisladora porteña y periodista murió en el marco de "un estudio de rutina", precisamente una endoscopía. Pero ¿qué es?, se trata de un procedimiento habitual que, en este caso, sorpresivamente culminó en un paro cardíaco, según confirmaron sus familiares.
El médico gastroenterólogo y endoscopista Pablo Cura (MP 115.256) explicó al diario Infobae que una endoscopía "es un estudio médico mínimamente invasivo que se realiza en todos los casos con anestesia general".
"El tipo de anestesia que se utiliza se denomina neuro lepto analgesia, que es una anestesia menor, no es la misma que se usa en casos de cirugía -detalló el miembro del departamento de Cirugía Abdominal y Proctología del Instituto de Oncología Ángel H. Roffo-. El riesgo de vida en un procedimiento diagnóstico tiene puramente que ver con el riesgo anestésico".
Y tras asegurar que "lo que se sabe es que la mujer estaba internada con un dolor epigástrico agudo", Cura destacó que "es clave que se haya hecho un buen diagnóstico al ingreso".
"Por vía endoscópica se pueden hacer otros procedimientos terapéuticos, en los que se ingresa, por ejemplo, a tomar biopsias, pero cuando el estudio es sólo con fines diagnósticos no existe ningún riesgo de complicación", insistió Cura. "Y cuando digo ninguno es cero", enfatizó.
"Se trata de un procedimiento sencillo; el riesgo es siempre anestésico y el tipo de anestesia depende del médico que lo esté haciendo", finalizó.
En similares términos se expresó el médico gastroenterólogo Carlos Waldbaum: "La endoscopía es una práctica segura, importante para el diagnóstico y prevención de enfermedades", comenzó.
En diálogo con A24, el especialista fue contundente al afirmar que los riesgos son mínimos: "Es muy común la endoscopía de urgencia. El grado de complicaciones ronda el uno en mil y son leves, y una muerte es una en diez mil".
Waldbaum indicó que "la complicación pudo provenir de la anestesia", sin embargo insistió en aclarar que "en la práctica habitual los métodos son muy seguros y la tasa de complicación es más que extraordinaria".
Por último, destacó la necesidad de "tranquilizar a la población en general" ya que "es un recurso muy frecuente y sencillo en manos de expertos".