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Espectaculos

¿Con qué galancito engaña Sabrina Rojas a Luciano Castro?

En las playas de Mardel se la pudo ver a la actriz y ex vedette muy mimosa con un hermoso pequeño. ¿Quién es?

14/01/2018

Son Los Campanelli de la Ciudad Feliz. Familia histórica de la televisión, Luciano Castro (37) y Sabrina Rojas (42) son la pareja actual que le hace honor al mítico programa de tevé. Acompañados de sus dos hermosos hijos, Esperanza, de cuatro añitos, y Fausto, de dos, todos los años eligen ese destino de la Costa Atlántica para transitar los últimos días de diciembre y los primeros de enero. Con un significado especial para ellos, Mardel fue el destino turístico donde se enamoraron, mientras integraban el elenco de la versión teatral de Valientes, en 2010.
 
Y hace ocho rigurosos años que repiten la rutina de compartir, primero como pareja y ahora como familia, el mismo circuito para los primeros tiempos de intenso calor. Instalados en un conocido hotel spa de la zona de Los Troncos, el protagonista de Las Estrellas –la ficción éxito que está llegando a su fin por El Trece– y la integrante de Golpe al corazón, por Telefe, desde allí procuraron organizar sus días en la ciudad teatral. Y dentro de la rutina, lo que no pudo faltar fue ir a la playa en clan.
 
¡Hasta las manos! Desde el balneario South Beach, de la zona del Faro, la parejita feliz se dedicó unos y otros besos más unos y otros abrazos en clara demostración de cariño… ¡Y no sólo eso! Cuidando por estar con sus hijos merodeándoles por los costados, yendo y viniendo hasta la orilla del mar, los papis le sacaron provecho a estar resguardos en una carpa para intensificar las muestras de afecto. Tanto que el galán –él mismo dijo que trabaja de “lindo”– se animó a posar una de sus manos sobre la sensual y curvilínea cola de su amada. Y, ella, tan encantada con su marido como siempre, le devolvió el gesto con un abrazo cerrado.
 
Pero no todo fueron arrumacos para la pareja. También estuvieron súper atentos a sus dos hijos –él también tiene uno de quince años, que no habría viajado–, a compartir con los más peques y estar atentos a los gestos y acciones de ellos. Incluso Sabri, cariñosa como siempre, se supo mostrar, se encargó de llenar de besos tanto a la nena como al nene y dejarles en claro que son absoluta prioridad en su vida. Y su papi no se quedó atrás, se sumó a las actividades en la arena y a los movimientos a la orilla del mar que querían hacer sus hijos.
 
Operativo retorno. Cuando el sol dejó de ser intenso, de mostrarse con claridad y perderse entre recurrentes nubes, Sabrina, Luciano y los nenes tuvieron que apostar al plan B: abrigarse. Así fue que la actriz se tuvo que poner un pantalón sobre la malla enteriza que resaltaba sus prominentes curvas, el morocho se alzó con un buzo deportivo para cubrir su torso, espalda y mangas, y a los más chiquitos también los cubrieron con ropitas para que le hicieran frente al fresco que se estaba empezando a hacer sentir.
 
Pero después de jugar y entretenerse por un rato más, Rojas y Castro decidieron levantar campamento para volver al lugar en donde estuvieron alejados, bajo la esperanza de volver al día siguiente para seguir chapoteando en el agua, haciendo dibujitos sobre la arena y disfrutando. Incluso, él se quedó con la ganas de hacer surf, uno de sus hobbies favoritos cada vez que se acerca a las playas del sur. ¿Habrán tenido revancha? Si no fue este año, seguramente lo será el próximo, siguiendo la línea de la costumbre que respetan a rajatabla.