Las patologías que giran en torno a las dietas y prohibiciones a la hora de comer son cada vez más frecuentes. Por qué hay que estar atentos a las comidas que se incluyen o eliminan del menú
Alimentarse de manera saludable debería ser la meta de todos. Sin embargo, están quienes desvían esa idea y la tergiversan. Desvirtúan el concepto de lo que está bien y mal a la hora de comer y lo convierten en una obsesión que afecta de manera negativa la salud de quien se somete a una dieta de tipo restrictiva.
De manera errónea, muchos se confunden y "obnubilan" con la idea de tener un cuerpo perfecto a expensas del sacrificio innecesario. La percepción de que se puede lograr a través de planes en los que se eliminan alimentos es totalmente erróneo. A esto se suma la falta de información o los falsos gurúes que circulan en las redes sociales.
La nutricionista Agustina Murcho hace referencia a este último concepto. "No hay que hacer caso a mensajes maliciosos que dan las chicas fit o profesionales obsesivos con la comida. Publican posteos en donde muestran la cantidad de calorías que comen y lo que tienen que hacer para gastarlo. Lamentablemente no es así, el cuerpo no funciona de esa forma, no somos una calculadora", dijo.
Por eso quienes se proponen llevar a cabo este tipo de dietas, inevitablemente terminan deseando mucho más aquello que se autoprohíben. "Está bien tener un antojo porque somos humanos y sucede, pero lo que no es normal es tener un apetito tan alto que ni siquiera permite masticar ni disfrutar lo que se está comiendo", detalló la especialista.
Dietas sin hidratos de carbono: son muy practicadas debido a que se baja de peso rápidamente eliminando los alimentos que contienen estos macronutrientes (frutas y harinas principalmente).
La contracara de este plan es la pérdida de masa muscular, cansancio, malestar general, irritabilidad, ansiedad y enlentecimiento del metabolismo.
Detox: está basada en la ingesta de jugos de frutas y verduras. Lamentablemente esta clase de regímenes hacen que el cuerpo pierda líquido, masa muscular y experimente una baja de de nutrientes.
Las consecuencias a corto y mediano plazo son el efecto rebote, picoteos y atracones por todo lo prohibido,. A esto se suman los dolores de cabeza, debilidad y bulimia o anorexia en personas propensas a padecer estas enfermedades.
Gluten free: el gluten es la proteína del trigo, la avena, la cebada y el centeno, y quienes la eliminan de sus comidas son aquellos que padecen celiaquía o algún tipo de alergia alimentaria. Sin embargo, existen personas que no miden las consecuencias y en su afán de perder kilos la restringen en su dieta.
Según investigadores de la Escuela de Salud Pública de Harvard, retirar el gluten sin prescripción médica se relaciona con un mayor riesgo de padecer diabetes tipo 2.