Florencia Silva aseguró que Julieta "nunca tuvo intención de pisar" a Genaro Fortunato. "Volvió a devolverle el celular", dijo.
Florencia Silva, hermana de Julieta, la mendocina de 29 años que el sábado atropelló y mató a Genaro Fortunato, su novio de 25, aseguró que el trágico episodio fue "un accidente" y que su hermana "nunca tuvo la intención de pisar" al rugbier.
"Ella nos dice que ha sido un accidente, en ningún momento tuvo intenciones de matarlo o pisarlo. Fue un accidente. Hay que esperar todo lo que se viene. Todavía las pruebas no están hechas, ella es inocente hasta que se demuestre lo contrario", dijo Florencia, la primera familiar de la acusada en romper el silencio.
En diálogo con Diario Uno de San Rafael y Canal 6 de Mendoza, la joven aseguró que Julieta "no es una mala persona" y mostró su malestar por los comentarios hirientes que anónimos realizan sobre su hermana en las redes sociales: "La gente se esconde detrás de un perfil de Facebook y dice cualquier cosa. No hay que olvidarse que atrás de ella hay una familia, está mi mamá y ella tiene hijos, no hay que olvidarse de eso; los niños no hicieron nada, juzgar y decir cosas que no son ciertas no está bueno".
Por otra parte, Florencia, que vive en Santa Cruz, habló de su dolor por la muerte de Genaro, quien "era una persona excelente". "Lamentamos mucho lo que pasó. Conocí a Genaro y era muy buena persona y tiene una familia hermosa. Es muy doloroso para todos, de las dos partes. Por eso digo que hay que esperar las pericias. No hay que hablar tanto porque hay dos familias de por medio", agregó la joven.
Respecto a lo que sucedió en la noche del sábado a la salida de un boliche de San Rafael, Florencia aseguró que "Julieta nunca lo vio en el piso" y que había regresado para "devolverle algo", aparentemente un celular. "Lo sé por boca de ella, que hizo 150 metros, no es que hizo una U automáticamente y volvió a pisarlo. Volvió buscándolo por el costado, mirando para el costado, volvió a devolverle el celular, algo así; era de noche, llovía y mi hermana tiene astigmatismo, que eso también lo pueden comprobar. Ella usa lentes que no los usaba en ese momento", explicó. Esa misma explicación, la de la devolución del celular, es la que dio Silva ante la Justicia al prestar declaración.
"La condenan como una persona mala, asesina, pero ella no tiene ese perfil, no va por la vida lastimando a la gente, al contrario, es muy buena persona, muy buena madre, buena hermana, buena hija", cerró Florencia. Julieta, mientras tanto, sigue detenida en el penal de San Rafael, adonde llegó imputada por "homicidio doblemente agravado por el vínculo y por alevosía". La mujer, jugadora de hockey y dueña de un negocio de venta de indumentaria deportiva, se arriesga ser condenada a una pena de prisión perpetua, que en la práctica representa 35 años de cumplimiento efectivo.