El niño convulsionó en su casa, lo llevaron al hospital y falleció poco después. La madre se descompensó en medio de un shock nervioso y poco después también murió.
Anoche, mientras los peritos y policías seguían tomando muestras, retirando elementos de prueba y custodiando la casa de calle Gorriti 844, varios vecinos permanecían en sus veredas tratando de saber qué había pasado con la joven mamá y su hijito fallecidos a media tarde.
Un llamado al Sistema de Emergencia 911 advirtió sobre el desvanecimiento de Alejandra Párraga, en la puerta de su casa.
La joven de 26 años estaba en medio de una crisis nerviosa, probablemente porque su pequeño hijo Amir Párraga, de 3 años, había convulsionado momentos antes y la ambulancia acababa de llevarlo al hospital con signos vitales muy débiles.
La familia Párraga, compuesta por los dos padres y otros seis hermanos de la joven, se dividieron para atender a sus dos seres queridos.
El pequeño Amir fue llevado al hospital Santa Clara de Asís, donde los médicos intentaron de todo, pero en minutos la vida del niño se desvaneció. Eran las 16.45.
En principio se dijo que la causa de muerte era paro cardiorrespiratorio por ahogamiento, pero con el paso de las horas se especificó que la causa original aún se debía establecer con una autopsia.
Cuando llegó la segunda ambulancia a la casa de los Párraga, Alejandra fue subida en camilla y trasladada al hospital San Bernardo.
A la guardia llegó inconsciente y en un primer diagnóstico de descompensada por una crisis de nervios, tal vez por lo que sucedía con su pequeño. Ella no sobrevivió a semejante cuadro. A las 17.50, aproximadamente, falleció, una hora después de su hijo.
Luego de estas dos dolorosas noticias, la Policía fue a la casa y comenzó el relevamiento de pruebas y entrevistas con familiares. Bioquímicos y personal de Criminalística trabajaron en la vivienda hasta bien entrada la noche.
Antes del desenlace
El fallecimiento de la joven mamá y su hijito desató versiones disímiles sobre qué originó todo.
Se supo que ella y su pequeño hijo habían estado durante la mañana en el centro de la ciudad. Allí compraron un agua, cuyo origen fue puesto en tela de juicio tras lo sucedido en la tarde. Y la bebieron.
Otro rumor que se dijo ayer era que el niño habría tenido una enfermedad previa.
Las primeras investigaciones no mencionaron ningún conflicto intrafamiliar ni nada que llamara la atención sobre la vida que llevaba la joven, quien ya estaba en pareja con un muchacho que no es el papá del niño. Él estuvo todo el tiempo en el hospital San Bernardo desde que Alejandra fue trasladada por la ambulancia.
"Es una muerte dudosa y lo que la haya causado seguramente se sabrá cuando se hagan las autopsias de los cuerpos, mientras tanto hay que tener cuidado con lo que se diga porque se puede dañar a una familia entera", dijo una fuente vinculada a la investigación.
El examen de los cuerpos fue pedido por el fiscal penal Pablo Paz, quien tomó intervención en el caso.
Fuente: El Tribuno