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Policiales

Prisión preventiva para un militar por la muerte de Lorena Mazzeo

La justicia española encarceló a un soldado acusado de matar a la santiagueña, encontrada muerta en octubre en la ciudad de Puerto del Rosario, España.

13/01/2017
Lorena Mazzeo.
El soldado detenido por el crimen de Lorena Mazzeo.

La muerte en confusas circunstancias de la santiagueña Lorena Mazzeo, ocurrida el pasado octubre en la localidad de Puerto del Rosario en las Islas Canarias de España, continúa siendo investigada a casi tres meses del episodio.

Las últimas noticias indican que un hombre fue detenido como presunto autor de la muerte de la santiagueña. Se trata de un soldado profesional que pertenece al Regimiento de Infantería Ligera Soria 9.

Los investigadores lo sitúan en lugar del crimen y como la última persona que estuvo en contacto con Lorena. La jueza que entiende en la causa decretó la prisión provisional, de acuerdo a lo informado por el diario La Provincia, de Las Palmas.

El detenido declaró el miércoles último ante la jueza Ana Moreno Valenciano durante más de tres horas asistido por su abogado. Posteriormente fue trasladado con fuertes medidas de seguridad desde la Comisaría de Policía hasta el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Puerto del Rosario. El detenido se negó a declarar ante la Policía pero permaneció durante cuatro horas en el Juzgado. Finalmente, la jueza decretó su ingreso en un Centro Penitenciario.

Lorena fue hallada muerta en el interior de la bañera en su domicilio situado en un céntrica avenida de Puerto del Rosario. Su cuerpo fue descubierto por los bomberos en el baño luego que una amiga alertara sobre su ausencia.

De acuerdo a lo que consignas medios españoles, estaba semidesnuda y con el cordón de la ducha enrollado en torno a su cuello, aunque sin señales externas de violencia. La posición del cuerpo, las luces de la vivienda apagadas, la heladera desenchufada a pesar de contener productos perecederos, las ventanas abiertas, los peces de la pecera muertos cuando era una amante de los animales, los cables de la computadora y el wifi desconectados, la desaparición del teléfono celular y de la ropa interior de la cama y la computadora escondida cuando era una asidua a las redes sociales, hicieron sospechar desde el primer momento a los investigadores de que la muerte no había sido fortuita. La autopsia reveló que el óbito se produjo por asfixia.

El trabajo de la policía se centró desde el primer momento en el entorno de la joven santiagueña. Además, el hecho de la desaparición de efectos personales, especialmente el celular hizo sospechar a los agentes que el presunto asesino quiso borrar todo tipo de huellas y obstaculizar la investigación.

La última vez que el padre de Lorena, que reside en Barcelona, tuvo contacto con ella fue el domingo 23 de octubre y se encontraba limpiando el piso. A partir de esa hora ya no se supo más de ella, lo que sitúa el día de la muerte en la citada fecha.