La vedette atraviesa por un drama familia que la tiene en vilo. Su hermano fue internado de urgencia en Uruguay. Por pedido de su familia ella no viajó y sigue con su trabajo en Mar del Plata.
La frase que suele envolver a los artistas es: “El show debe continuar”. Teniéndola como estandarte, como bandera que alzan en la primera clase que toman con la ilusión de construir una carrera arriba de los escenarios, no son pocos los que se guardan los problemas en el bolsillo y siguen adelante como si nada pasara. Muchas veces el dolor va más allá que un simple percance o angustia.
Mientras la vedette Mónica Farro se encuentra en Mar del Plata, llevando adelante el éxito Cocodrilo, la revista, recibió una dura noticia desde Uruguay. El drama familiar golpeó su puerta y ella lleva la situación adelante con el corazón destrozado, pero con la endereza de una artista de pura cepa.
En las últimas horas internaron de urgencia a su hermano luego de que se desvaneciera producto de un derrame cerebral. La situación requiere de una intervención quirúrgica de inmediato, pero hasta que no se estabilice, no pueden llevar adelante la cirugía.
“Estoy en comunicación permanente con mi familia, ellos me tienen al tanto de cada novedad. Lo último que sabemos es que los médicos están esperando que el derrame se quede dónde está y no se pase de lado para no complicar la situación. Con eso estabilizado lo van a operar”.
Pese a la gravedad del caso, Mónica decidió no viajar a su país para acompañar a los suyos. “Mi familia me dice que no podemos hacer nada, que no tiene sentido que viaje. Estar allá o acá es lo mismo. Yo estoy destrozada, no lo voy a negar, pero el show debe continuar. Tanto el elenco, como Omar Suárez, me están conteniendo. Omar me dio la libertad para hacer lo que quiera, pero voy a seguir en Mar del Plata, con mi trabajo. De alguna manera el cariño del público me hace bien. se que Dios me va a dar fuerzas para soportar y va a ayudar a mi hermano. Todo va a estar bien”.