Hace varios meses sale con la modelo y ya piensa en presentarse en las próximas elecciones que se realizarán en Racing para ser presidente.
En un contexto de amigos, filiales y figuras que supieron llevar los colores de Racing con orgullo, Matías Gainza Eurnekian ofreció un cóctel de fin de año. La cita fue el 14 de diciembre, en el Palacio San Miguel, donde se reunió con lo más íntimo de quienes acompañaron su carrera y presentó además en sociedad a su novia, la modelo Erika Mitdank, con quien se encuentra conviviendo entre Miami y Buenos Aires. Entre los presentes se encontraban su abogado, Mariano Cúneo Libarona, el ex futbolista Hugo Lamadrid, periodistas e hinchas. Entre las perlitas de la noche se puede comentar la entretenida charla que mantuvieron Flavio Azzaro y Maypi Delgado, en la cual él obviamente le habló de fútbol y ella de modas.
De todas maneras, los intentos del periodista de “anotar un gol” con la bella morocha quedaron sólo en eso. La velada contó con el show de Americones, proyecciones audiovisuales de los mejores momentos de la historia de Racing Club, discursos y regalos, entre ellos: maquetas a escala del mítico “Cilindro” de Avellaneda, sumadas a memorabilia, camisetas y merchandising del club. Para el final de la noche, Gainza Eurnekian pronunció un discurso donde se lo notó distendido y relajado, probablemente debido a su experiencia previa frente a los auditorios, ya que fue el fundador de la primera fábrica de nanotecnología de Sudamérica, que actualmente expandió a Estados Unidos y Europa.
En sus declaraciones hizo hincapié en pelearle la elecciones a Víctor Blanco (actual presidente de Racing) y en la confianza que se tiene a sí mismo y a su equipo, el cual es liderado por su mano derecha, su hermano Ezequiel Gainza Eurnekian. Matías hizo una invitación al oficialismo del club y a la oposición para discutir lo que Racing se merece y dar así el salto de calidad que le permita a la institución afianzarse como un gran equipo, tanto nacional como internacionalmente. Gainza Eurnekian fue nombrado por Harvard y Forbes como uno de los cien empresarios más importantes que contribuyeron a cambiar el mundo y claramente persigue el objetivo para el club de sus amores. Hablando de amores, Matías no se despegó un solo instante de Erika, al punto de tomarse numerosas fotos con ella, entre gestos de afecto mutuo y de un amor que promete más, mucho más.