Delbonis se impuso por 6-3, 6-4, 6-2 sobre Karlovic y consiguió el punto definitivo para el triunfo sobre Croacia.
El llanto de felicidad de Delbonis es el desahogo de un grito contenido de todo un país, que esperaba hace mucho esta consagración.
¡Si, somos campeones de la Copa Davis! Grítelo bien fuerte, festeje como lo hace cada argentino desperdigado por el mundo. Este domingo 27 de noviembre de 2016 quedará grabado a fuego para siempre en la historia grande del deporte argentino.
En una jornada que no había comenzado bien con Del Potro dos sets abajo ante Cilic, de repente salió el sol y todo empezó a cambiar. El tandilense lo dio vuelta a puro corazón, empató la serie y le dejó la mesa servida a Federico Delbonis, que asumía la gran responsabilidad ante Karlovic.
Y el azuleño estuvo una vez más a la altura de las circunstancias. Ya había puesto en apuros a Cilic en la primera jornada a pesar de la derrota, mostrando nuevamente un gran nivel, aplastó a su rival por 6-3, 6-4, 6-2 para conseguir el punto definitivo que desató el delirio argentino en Zagreb.
Así, Delpo, Delbo, Pella, Mayer, Orsanic, Trungelliti fueron todos en uno, dejando atrás los fantasmas del pasado para quedarse por primera vez en la historia con la Ensaladera.
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