La morocha estaba tomando sol cuando de repente, una visita inesperada le cambió la tarde. Su vecino se cruzó a su casa y, sin mediar palabras, le comió la boca.
Es una de las morochas más bellas y que más suspiros despierta. Hombres dispuestos a conquistarla hacen fila en la puerta de su casa intentado llegar a su corazón. Sin embargo, por esas cosas de la vida, Silvina Escudero no logra encontrar a su media naranja, a esa persona que llene el alma y la complete como mujer.
Los hombres que presentó en sociedad apenas le duran un puñado de meses. Cuando parece que está dispuesta a dar ese pasa tan significante, los muchachos salen corriendo despavoridos y, si no es así, es ella la que pega media vuelta y abandona la pareja. Por una cosa o por otra, no tiene suerte con los noviazgos. “Tuve 9 novios en mi vida: Caco a los 17, Germán Paoloski a los 19, luego Gusti, después Mariano, a continuación Matías Alé, el sexto Nico Riera, Cayetano, Martín Amestoy, Tute”, reconoció.
En los últimos días, mientras disfrutaba tirada al sol, con su diminuta bikini, un vecino la vio y no se resistió. Sin pedir permiso cruzó el alambrado y fue corriendo a su encuentro. No solo eso. Aprovechó que estaba distraída y le comió la boca. La morocha no esquivó el tema y las redes sociales brindó más detalles del tema en cuestión. Subió la foto del momento justo en el que el perro de la casa de al lado le daba besos bajo la frase: “Chapando con el potro de mi vecino”.
Amante de la naturaleza, de la vida al aire libre, con los animales se lleva bastante bien. Sus mascotas, y las de los vecinos, son quienes más la entienden y están junto a ella en todo momento. en este caso, parece que su sexy figura al sol no solo llama la atención de los señores, también de los animales.
Una foto publicada por Silvina Escudero (@escuderosilvina) el