Se trata de serpientes agresivas que pueden llegar a medir dos metros de largo y su veneno puede resultar mortal si no es tratado a tiempo.
Autoridades provinciales en el este de China están tratando de localizar a unas 50 serpientes venenosas que se escaparon de una granja ilegal dedicada a su crianza.
Unas 200 cobras de monóculo (Naja kaouthia) se escaparon de la granja en agosto pasado, pero unas 150 ya fueron capturadas o exterminadas.
Según las autoridades del distrito de Liuhe, en la provincia de Nanjing, se trata de cobras bebé de aproximadamente 20 cm de largo, informó la agencia estatal de noticias Xinhua.
Se trata de serpientes agresivas que pueden llegar a medir dos metros de largo y su veneno puede resultar mortal si no es tratado a tiempo.
Pero el veneno de las cobras bebé es menos tóxico que el de las adultas.
Medicina tradicional
Varias partes de serpientes son utilizadas para la preparación de medicinas tradicionales chinas.
Y un total de 1.820 huevos de cobras de monóculo fueron llevados a la granja de serpientes Chunyi en agosto, aunque sólo 1.500 reventaron, informó Xinhua.
Las autoridades, sin embargo, solamente se enteraron de la fuga de parte de las cobras este mes, cuando un campesino de Liuhe descubrió y mató una cobra en su casa.
La granja de serpientes fue inmediatamente clausurada por las autoridades.
La fuga de serpientes venenosas en China no es nada inusual.
En agosto pasado 23 cobras bebé también se escaparon de una granja en Sichuan.