El volante de Huracán habló tras su regreso y se emocionó hasta las lágrimas.
Patricio Toranzo volvió al fútbol. Feliz. Una noche de mayo recuperó esa sensación inexplicable de sentir que, tal vez definitivamente, dejó atrás una pesadilla.
El volante de Huracán, que perdió las falanges distales y medias de tres dedos de su pie derecho tras el accidente vial que sufrió el plantel el 10 de febrero, ingresó a los 33 minutos del segundo tiempo.
Toranzo se retiró entre lágrimas: "Yo solo sé las cosas que callé, me lo voy a llevar al cajón con una bandera".
Volvió a jugar El Pato Toranzo.
— Damián M. Verdasco (@ranamatius) 14 de mayo de 2016
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