X
Locales

Duende Garnica: "El Olvidao no es una characera mía, es la vivencia de muchísima gente"

El artista se prestó al diálogo para el ciclo EntreVistas de Diario Panorama en donde contó cómo nació "El Duende", su infancia en Selva, su juventud en Córdoba y en Buenos Aires en donde creó "El Olvidao" al que Mercedes Sosa llevó por el mundo.

25/08/2015

"Mi nombre me lleva inmediatamente a la infancia o la juventud, porque así me dicen mis compañeros de la primaria, de la secundaria o de la colimba. Y en Selva, donde yo he nacido me dicen Pico", comienza el diálogo Hugo Garnica o simplemente El Duende que pasa a contar de donde llegó ese apodo que le quedó como un sello indeleble.

"En el 83 me fui a Córdoba a estudiar arquitectura, porque estaba haciendo la colimba y como estaba bajo bandera no rendía el cursillo, yo soy Maestro Mayor de Obras de la Industrial.
Y en la pensión en Córdoba había un tipo que se llamaba Faustino Flores y era todo un personaje... y donde yo iba estaba él y fue el que me decía este parece un duende. Y hace 25 años que me apodaron así (...) Años después lo volví a encontrar en Tilcara, pero más allá de la fisonomía y todo eso Lo de Duende me gusta mucho por un texto de García Lorca -Juego y Teoría del Duende-, que habría que leerlo porque es muy interesante".

Su infancia

"Mi viejo era estafeta de Correo, no llegaba a jefe, él es de Jume Esquina, y lo trasladan a Selva donde éramos 2000 habitantes 1993 rubios de ojos celeste y siete morochos, que eramos los Garnica, Tiseira, Trejo y Mena, pero como mi viejo vivía aquí en la Sor Mercedes Guerra siempre veníamos en el tren a ver a mi abuela para julio y Navidad".

"La Forestal

"Lo que me llamó más la atención fue pasar por calle Sarmiento en donde estaba un gremio de hacheros en donde encontré tres personas escuálidas que me llamaron mucho la atención, y escribí mi primer chacarera que es La Forestal, y esto fue en el año 80".

Su vida en Córdoba

"En Córdoba hice tres años de arquitectura y empecé a militar en donde abrimos el centro de estudiantes y recuperamos el comedor, era una Córdoba combativa. Hasta tercer año estudié bien y de ahí la vida me llevó a esa bohemia".

El Olvidao

"En Córdoba estábamos con los Copla y con Raly Barrionuevo, y es una catapulta, se tiene que pasar si o si por Córdoba para generarte un espacio, pero ya no daba más y tiene un techo, y me fui a Buenos Aires en donde veo ese exilio santiagueño urbano en José C. Paz o Berazategui (...)  Viví en el conurbano y ahí pude comprender... De ahí nace El Olvidao, que no es una chacarera mía, es la viviencia de muchísima gente, de un pueblo. Yo solamente lo que hice fue escribirlo (...) en el Olvidao se identifica al país, y no tan solo el desarraigo (...) lo peor que tenemos es la amnesia (...) esa esa mano que limpia y la otra que tapa y olvida".

Mercedes Sosa

"Que Mercedes haya grabado y llevado por el mundo la canción de un chango santiagueño que le puso la palabra levantate cagón en la boca de una señora (...) Ella fue la que me levantó y en mi canción a todos los compañeros que están olvidados (...) No grabé nunca un disco, porque no canto como debería cantar, tampoco toco como debería tocar, pero con la pluma no tengo plata pero tampoco miedo".