Estados Unidos tomó esa decisión luego del ataque el martes último al consulado estadounidense. "Solo es una medida precautoria", aseguran en el Pentágono.
Dos destructores de la Armada de Estados Unidos y una unidad de 50 marines partieron hacia la costa de Libia. La decisión se produce tras el ataque el martes al consulado estadounidense en Bengasi por parte de militantes armados que protestaban contra un video que denigra el islamismo, y que dejó un saldo de cuatro estadounidenses muertos, entre ellos el embajador.
El envío de una FAST (Equipo de Flora Anti Terrorismo y de Seguridad, por su sigla en inglés) "solo es una medida precautoria", dijo el portavoz del Pentágono, George Little, quien se negó a dar precisiones sobre la trayectoria de los barcos enviados.
El presidente estadounidense Barack Obama ordenó de inmediato que se incremente la seguridad en las misiones diplomáticas de su país en el mundo, al tiempo que condenó el ataque en Bengasi, que coincidió con el décimoprimer aniversario de los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra Estados Unidos.