La decisión de la Corte Suprema de Justicia de la Nación de impedir una transfusión de sangre a un Testigo de Jehová, generó un debate a nivel nacional sobre la legitimidad de los denominados “contratos de de adhesión”. El Dr. Raúl Romero, cuestionó la postura del máximo tribunal.
El Camarista del Poder Judicial de Santiago del Estero, Raúl Romero, se sumó al debate generado a nivel nacional, por el caso del joven Pablo Albarracini, quien resultó baleado en un intento de robo y que no acepta una transfusión de sangre recomendada por los médicos que lo atienden en la Clínica Bazterrica de la Capital Federal, por una creencia religiosa.
En tal sentido, el Dr. Romero cuestionó la existencia en el mundo jurídico de los denominados “contratos de adhesión”, debido a la generalidad de los casos que atiende y por la falta de información certera que brinda un documento de esas características.
Según el Dr. Romero, este tipo de contratos se encuentran junto a un formulario impreso de antemano, en el que la persona que se adhiere, sólo debe llenar un espacio en blanco con los datos mínimos del interesado, lo cual, no significa una expresión concreta de voluntad debido a que en esas circunstancias, no hay tiempo de leer la letra chica del documento.
Recordemos que por este caso, Jorge Albarricini, padre del seguidor de los Testigos de Jehová, un robo, criticó el fallo de la Corte Suprema que terminó avalando la voluntad del paciente a no recibir transfusiones de sangre por sus creencias religiosas.
"A la justicia le falta frescura", fustigó el padre de Pablo Albarracini, e indicó que el máximo tribunal "se maneja como los Testigos de Jehová".
"Los testigos no van a cambiar su postura, porque con su idea de la vida eterna no les importa la vida en la tierra", criticó severamente Albarracini a la organización que pertenecía su hijo.
"Ellos están pendientes de la vida eterna, ignoran y desprecian todo lo demás, incluso el sufrimiento que pasa uno de ellos",acotó.
Y, recordó que el joven "tiene dos balas alojadas en su cuerpo, una alojada en su cabeza. Ahora se llegó a la conclusión de que hay que sacárselas y son cirugías sangrantes a largo plazo".
Respecto de la esposa de Albarracini, dijo que "ella es la única que puede revertir esto".
"Es terrible no poder decidir, no poder hacer, no esta en la mente de uno y lo único que se pude hacer es entrar con un equipo comando y transfundirlo", pidió el padre.