Usted también puede ser adicto a WhatsApp y no lo sabe.
El 2014 dejó una nueva y curiosa enfermedad: la WhatsAppitis. Se trata la adicción a WhatsApp, el servicio de mensajería gratuita que cuenta con millones de usuarios en todo el mundo.
Un estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) revela que 9 de cada 10 ciudadanos ha usado su smartphone para contactar con amigos y familiares a través de WhatsApp en los últimos seis meses, la mayoría de veces para hablar sin ningún motivo específico.
A través de él han llegado a la conclusión de que se trata de una aplicación que puede crear una gran adicción, pero llegados a este punto nos preguntamos en qué momento se puede considerar que se sufre WhatsAppitis.
¿Pero cómo saber si es que en verdad padecemos esa adicción? Los síntomas se podría decir que son los siguientes: estar pendiente todo el rato de recibir nuevos mensajes, mirar constantemente el doble check para ver si se ha leído el mensaje enviado, algo que seguro que ha aumentado con la llegada del polémico doble check azul, o las denominadas “vibraciones fantasmas”.
Es raro, porque hace unos años ni siquiera se podía imaginar que algo así pudiera llegar a existir. Sin embargo, hoy se ha convertido en una nueva y peligrosa adicción.