Los servicios de salud de algunas ciudades en EE.UU. registraron 174 sobredosis en 6 días.
Cuando los servicios de emergencia encontraron a Michael Purvis, tuvieron que suministrarle cuatro dosis de naloxona.
Ese fármaco contrarresta los efectos de la sobredosis de opiáceos, como la heroína, en momentos en que la víctima ve amenazada su vida.
Pero lo normal es usar una dosis de naloxona, o dos en casos más graves, y no las cuatro que le fueron suministradas a Purvis en el estado de Indiana (centro de EE.UU.).
Esa anormalidad también es la que han estado experimentando localidades de los estados de Ohio y Kentucky, que junto a Indiana están registrando un número de sobredosis pocas veces visto.
Los servicios de emergencias en esos estados atendieron 174 casos en un periodo de seis días la semana pasada, cuando lo habitual son 25 casos semanales.
Las autoridades apuntan a que esa cifra se debe a que los usuarios se están inyectando una combinación letal de drogas.
Desde julio, las autoridades en Cincinnati detectaron que la heroína se está combinando con carfentanil, aunque también sospechan de la mezcla confentanilo, ambos opiáceos sintéticos.
La Agencia Antidrogas de EE.UU. (DEA, por sus siglas en inglés) describe al carfentanil como una droga 10.000 veces más poderosa que la morfina que es "usada en la práctica veterinaria para inmovilizar animales grandes".
Es por ello que también se conoce como "tranquilizante para elefantes".
El fentanilo es 100 veces menos poderoso que el carfentanil, pero una sobredosis con este opiáceo es potencialmente letal.
¿Es un brote?
El promedio de 25 casos a la semana "es el normal", dijo a BBC Mundo Thomas Synan, de la Coalición para las Drogas del condado de Hamilton (Ohio).
Aunque no en todos los casos puede comprobarse que los usuarios de heroína consumieron una mezcla con carfentanil, las autoridades están encontrando coincidencias entre aquellos que sufrieron sobredosis.
Una es que las intoxicaciones fueron más fuertes de lo normal. Están investigando si hay un patrón en los lugares donde se han ubicado a las víctimas.
La mayoría está en el área de Cincinnati, en el "triángulo" de estados entre Ohio, Kentucky e Indiana, apunta Synan.
El vocero de la Policía Estatal de Indiana, Stephen Wheeles, dijo que probablemente se trata de un "envío" de esta droga que llegó a Cincinnati y de ahí se distribuyó a otras localidades.
"Los consumidores la esperan y tan pronto como llega la entrega, comienzan a usarla", dijo Wheeles en una rueda de prensa, según el diario local The Republic.
En el condado de Jennings hubo diez reportes de sobredosis alrededor de las 06:00 pm del jueves pasado, entre ellos tres menores de 18 años.
La semana pasada se habían registrado seis muertes en Ohio y una más en Indiana, pero podría haber más no detectadas.
Otros reportes ya han comenzado a aparecer en Pensilvania, Virginia Occidental y Florida uso de este tipo de combinación letal de drogas.
En el caso de Michael Purvis, no solo fue una víctima de una sobredosis, sino que luego fue arrestado como sospechoso de "comerciar una sustancia controlada", dijo a BBC Mundo un portavoz de la policía de la ciudad de Seymour, en Indiana.
Además de admitir que proporcionó heroína a dos mujeres, se cree que puede estar relacionado con la distribución de heroína combinada con carfentanil o fentanilo.
Según Thomas Synan los consumidores nunca conocen con qué está mezclada la heroína que consumen.
Viven las recompensas temporales de la droga, pero también sus consecuencias.