El disco, descubierto en 1999 cerca de la ciudad alemana de Nebra, está considerado como la representación del cielo más antigua conocida en el mundo.
Científicos han realizado por primera vez un análisis exhaustivo del proceso de fabricación del Disco celeste de Nebra, un artefacto de la Edad de Bronce de más de 3.600 años de antigüedad.
HACÉ CLICK AQUÍ PARA UNIRTE AL CANAL DE WHATSAPP DE DIARIO PANORAMA Y ESTAR SIEMPRE INFORMADO
El disco, descubierto en 1999 cerca de la ciudad alemana de Nebra, en el estado oriental de Sajonia-Anhalt, está considerado como la representación del cielo más antigua conocida en el mundo.
El estudio, publicado por la revista Scientific Reports, se centra en el detallado proceso de forja de la base de bronce del disco. Revela que el metal se calentó a unos 700 grados centígrados y se sometió a hasta 10 ciclos de calentamiento, forjado y recocido, un proceso de tratamiento térmico utilizado para hacer que un material sea menos duro y más trabajable, con el fin de lograr la deformación y la forma necesarias.
El arqueólogo Harald Meller dijo que la investigación examina la creación de la forma de bronce del disco, no los elementos de oro adheridos a él. Las técnicas modernas de análisis, incluido el examen microestructural y la obtención de imágenes, confirmaron la antigua artesanía. Una muestra tomada en 2002 y reexaminada durante el estudio proporcionó más datos sobre la construcción del disco, junto con mediciones de dureza.
Una herramienta astronómica
Disco celeste de Nebra
El Disco celeste de Nebra, exhibe motivos dorados que representan el sol, la luna, las estrellas y un barco, atribuido a la cultura Únětice de la Edad de Bronce centroeuropea, según reporta Interesting Engineering. Desde su recuperación por la policía en 2002 y retorno a Sajonia-Anhalt, los estudios científicos han revelado detalles importantes, incluyendo información sobre su coloración original.
En 2013, el disco se incluyó en el Registro de la Memoria del Mundo de la UNESCO, que recoge objetos de importancia para la humanidad, y se considera uno de los hallazgos arqueológicos más significativos de Alemania.
Según la revista Archaeology, el disco cumplía una doble función: como herramienta astronómica y como símbolo del orden cósmico, siendo fundamental en las prácticas agrícolas y rituales de la cultura Únětice. Su elaboración en cuatro fases distintas demuestra una sofisticada comprensión tanto de la metalurgia como de la observación celestial. Su posterior enterramiento como ofrenda ritual evidencia su profunda importancia espiritual en esta sociedad de la Edad de Bronce.
La investigación se llevó a cabo en colaboración con la Oficina Estatal de Gestión del Patrimonio y Arqueología de Sajonia-Anhalt, la Universidad Otto von Guericke de Magdeburgo y la empresa DeltaSigma Analytics.